La nueva edición de ´Operación Triunfo´ no solo está siendo un éxito de audiencia (la última gala se alzó con un 15, 9%, solo por detrás de ´La que se avecina´), sino también un fenómeno social que se está cociendo en las redes sociales, sobre todo en Twitter. El hastag #OTDirecto es trending topic a diario, en muchas ocasiones situándose en la primera posición. ¿El secreto del éxito? Nada de discusiones ni escenas de cama, sino un casting de gente ´milenial´ con frescura e inocencia con el que el sector más joven de la ´generación Y´ empatizamos. Miles de tweets aclaman a diario, casi más que sus voces, los mensajes que están transmitiendo los participantes. Ayer varios medios se hicieron eco de que uno de ellos denunciaba a cámara la situación de los refugiados. «Desafortunadamente, países como España solo cumplen un 11% de la acogida de refugiados que tendrían que completar. Ayudemos a una buena causa tanto en el Mediterráneo como en otros mares», denunciaba un barcelonés de 20 años. Otro vídeo celebrado por los usuarios de la red social muestra cómo una de las concursantes le soltaba a su compañero «has gritado como una nenaza», a lo que él respondía «eso es muy sexista». «Es verdad, lo siento», terminaba ella. También se ha escuchado que se pedían entre ellos no bromear con el suicidio o cómo hablaban abiertamente de la transexualidad. Estas conversaciones en un programa de la televisión pública son muy necesarias. Más allá de lo bien que canten (o no), están dando una lección al formato de telerrealidad, siempre criticado por mostrar lo peor de la sociedad. Esta vez están hablando un idioma que, espero, representa a las nuevas generaciones.
