La recuperación del estado del Mar Menor es uno de los objetivos más importantes para nuestra región y se encuentra en la agenda de la sociedad organizada y no organizada y de todas las formaciones políticas que ven con enorme preocupación que el tiempo va pasando y no se avanza en esta meta.

Quien tiene la mayor responsabilidad en este asunto es, sin duda, el Gobierno del Partido Popular que, por inacción, ha permitido durante muchos años, y continúa haciéndolo hoy, situaciones que perjudican gravemente al Mar Menor y contribuyen a aumentar el lamentable estado en el que se encuentra.

Recientemente, el PSOE ha manifestado públicamente que la solución para alcanzar el vertido cero, basada en la construcción de un enorme conjunto de tanques de tormenta, no es adecuada. Y a los hechos nos remitimos. Las lluvias torrenciales que arrastran una gran cantidad de sustancias contaminantes que desembocan en el Mar Menor, colapsan estas infraestructuras y las rebasan, no siendo capaces de evitar los vertidos a la laguna, ni las inundaciones en las calles y en los edificios.

La última experiencia la tuvimos en diciembre del año pasado cuando se constató que, ante las lluvias torrenciales, los tanques de tormenta no son útiles para este propósito. Si a esto le añadimos las deficiencias observadas en algunos de ellos en los elementos de captación y conducción de las aguas, además de su posible mal emplazamiento, debe hacernos pensar en otras soluciones alternativas que sí eviten los vertidos de sustancias contaminantes al Mar Menor.

Como quiera que ni siquiera el Comité Científico considera que los tanques de tormenta sean una prioridad para la regeneración del Mar Menor y que, en su opinión, son de poca utilidad para el propósito por el que son construidos, los socialistas hemos concluido que es conveniente detener la ejecución de proyectos de construcción de estas infraestructuras.

Puede ser de utilidad el emplazamiento de alguno de ellos en aquellos lugares donde se demuestre que responderán positivamente al objetivo perseguido, pero parece razonable que sea el Comité Científico quien determine en qué casos y en qué condiciones puede ser necesario un tanque de tormentas.

El Gobierno del Partido Popular está empecinado en seguir construyendo estas infraestructuras, sin la opinión, siquiera, de quienes más saben sobre la situación del Mar Menor y las soluciones más convenientes para su regeneración. El Comité Científico no debe ser sólo una pantalla ante la Unión Europea. Hay que utilizarlo convenientemente como fuente de conocimiento y toma de decisiones.

Como solución alternativa, los socialistas creemos que sería de mayor utilidad, desarrollar un Plan de Prevención de Avenidas e Inundaciones para el Campo de Cartagena, sujeto también a la valoración del Comité Científico, que evitase que las aguas de escorrentía llegaran al Mar Menor con los altos índices de contaminación actuales y evitaran los episodios de inundaciones que se producen en los municipios costeros.

En otro orden de cosas, es prioritario establecer normativas que, al igual que el proyecto de ley de medidas urgentes para la sostenibilidad del Mar Menor, apliquen criterios de usos no sólo para la agricultura, que no es la única responsable de su estado, sino también para evitar la contaminación producida por los residuos mineros que lleguen al Mar Menor o los derivados de las embarcaciones a motor que navegan por la laguna. Por no hablar de la necesidad de restringir cualquier tipo de desarrollo urbanístico en las zonas de influencia del Mar Menor.

En relación con el proyecto de ley mencionado, el PSOE, conjuntamente con los grupos parlamentarios de la oposición en la Asamblea Regional, como es conocido, hemos presentado un conjunto de enmiendas destinadas a corregir situaciones y proponer medidas que, sin ninguna duda y pese a las zancadillas del grupo popular, serán eficaces para reducir ostensiblemente la contaminación de la actividad agraria sobre el Mar Menor.

Es verdad que existe una cierta resistencia por parte de las organizaciones agrarias a las enmiendas. Pero estamos convencidos de que, tal y como han manifestado y demostrado en numerosas ocasiones, pondrán toda su colaboración para que su aplicación redunde positivamente en el objetivo compartido de reducir drásticamente la entrada de nitratos a la laguna.

No obstante, y después de diversas reuniones con el sector agrario, los grupos parlamentarios firmantes de las enmiendas hemos mostrado nuestra disposición a matizar algunas de ellas. Pero de nuevo nos hemos encontrado con el muro del Partido Popular que rechaza la idea propuesta de creación de una Ponencia para tratar de acordar una nueva redacción.

Los populares parecen abrazar ese dicho de «cuanto peor mejor» para tratar de obtener algún tipo de rédito político, utilizando irresponsablemente algo tan serio como es la agricultura, y los agricultores, que constituye un pilar importante para nuestra economía regional.

El Mar Menor es de todos y lo único que nos importa a todos es que, algún día, podamos volver a disfrutar de uno de los espacios naturales más emblemáticos de la Región de Murcia.