Cuando pase este fin de semana, con la Morenica en la ciudad; los huertos encantados de recibir comensales; la Virgen de las Huertas en Lorca preparada para celebrar su onomástica; los libros en la mochila, los niños llorando, los padres ilusionados... Cuando pase este fin de semana, la sensación de normalidad volverá a nuestros hogares. Para muchos, una normalidad deseada, para otros, trastocada. Imagínense la cantidad de matrimonios que se habrá devorado este verano o la cantidad de amores nuevos que han surgido a la orilla del mar. Habrá quienes han cerrado el negocio de su vida, como también existirá quien se habrá quedado en el paro. Así es la vida, de eso se trata, de vivir e ir saltando o sorteando obstáculos. Hay quienes han vuelto a casa con la satisfacción (qué grandes) de la noticia del cierre de una de las playas del Mar Menor. ¡Con la ilusión que les hacía y ha tenido que ser a la vuelta! Bueno, pues que aplaudan en la distancia. Hay gente para todo y, en esta Región, a calderetas. Se publicó en Twitter y ni un segundo tardaron en pintar almohadillas con mensajes de mal agüero: #losabiamos, #loesperabamos, #devergüenza.... ¡Ay, volvemos a la normalidad!