Es un momento histórico. No hay vuelta atrás». Con estas palabras, Theresa May, primera ministra del Reino Unido, oficializaba el inicio del Brexit o desvinculación de la Unión Europea por parte del Reino Unido tras 44 años de permanencia. Un proceso que debería culminar, de manera completa, en marzo de 2019€ pero que, dado lo inédito de la situación (primera vez, en 60 años, que un miembro de la UE abandona las instituciones comunitarias), está cargado de incertidumbres.

Pasada la incredulidad de países y opinión pública continentales (tras el referéndum de junio, muchos ´expertos´ arguyeron que el Brexit no vería la luz, dada su complejidad técnica o que, incluso, podría realizarse una segunda consulta que revocara la decisión inicial), se abre una etapa en la que, pese a la intención de «minimizar daños» entre las partes (como defendió Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo), tampoco se puede descartar un final abrupto, transcurridos los dos años para rubricar la separación.

Y es que no hay entendimiento ni en la metodología negociadora. Mientras el Reino Unido se muestra partidario de un acuerdo global, donde se pacte (al mismo tiempo) el divorcio y la nueva relación entre la Unión Europea y las Islas, Alemania y Francia ya han respondido que, cada cosa, a su tiempo: primero, la ruptura y, después, el nuevo marco de relación.

Por su parte, las autoridades británicas ya han advertido que emplearán todas las armas a su alcance: sea dejando caer que pueden convertirse en una especie de Singapur (o paraíso fiscal) o advirtiendo de que dejarán de cooperar en materia de seguridad con el resto del continente, si no obtienen contrapartidas comerciales beneficiosas. El partido acaba de comenzar y promete ser duro y áspero.

CÓMO LO VEN

La caída de Venezuela. The Economist efectuaba una radiografía de la economía venezolana, que no ha parado de acumular resultados negativos durante los últimos años. Para 2017, el FMI augura una inflación del 2.200% (no hay previsiones oficiales del gobierno de Maduro), mientras que el año anterior terminó con una contracción del PIB cercana al 14%. Si en 2001 era uno de los países más ricos de América Latina, ahora se encuentra entre los más pobres.

Decepción del SPD. Clarín destacaba los magníficos resultados del partido de Angela Merkel, la cristianodemócrata CDU, en el land del Sarre (un territorio donde había, hasta ahora, una clara mayoría social de izquierdas). Sus más de 10 puntos de ventaja sobre los socialdemócratas suponen una clara decepción para estos, con vistas a las elecciones federales, previstas para dentro de seis meses. Según las encuestas, el candidato del SPD y ex presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, podría disputar la victoria a Merkel.

CÓMO NOS VEN

Irrumpe Susana. Financial Times reseñaba la entrada oficial en campaña, para obtener el liderazgo del PSOE, de Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía. Díaz tratará de ganar a sus otros dos rivales: Patxi López, ex lehendakari vasco y Pedro Sánchez, ex secretario general del partido. Todo ello para reconfigurar una formación con unas expectativas de apoyo cercanas al 20%, tras haber perdido popularidad entre los votantes jóvenes y urbanos de izquierdas, ahora decantados hacia Podemos.

Crece la preocupación por el Brexit. Gulf News señalaba la creciente preocupación de los jubilados británicos en España, después de que la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, activara el artículo que da inicio a la salida de su país de la Unión Europea. Concretamente, muchos de esos ciudadanos que pasan su retiro en territorio español temen verse forzados a regresar a su país, si se les limita el libre acceso a nuestra sanidad pública.

QUÉ SE CUECE

Bertelsmann (casi) digital. Digimedios detallaba las cuentas del gigante de la comunicación alemán Bertelsmann y ofrecía un dato significativo: de los casi 17.000 millones de euros obtenidos en 2016, 7.400 millones (un 44% del total) son ingresos digitales. Dicha proporción era de un 30%, cinco años antes. Además, los beneficios logrados fuera de Europa, su mercado tradicional, han pasado de ser un 20% a un 28% del conjunto.

WhatsApp permitirá borrar. elpais.com destacaba la última innovación de la red de mensajería WhatsApp: habrá una función para deshacer y hacer desaparecer un mensaje en los dos minutos siguientes a haberlo enviado. Dicha función servirá para textos, imágenes, vídeos o audios remitidos. Esta versión existía en versión de prueba, pero se permitía a los usuarios poder borrar sus mensajes con un margen de media hora; tras una encuesta, se ha decidido dejar el límite de tiempo en 120 segundos.