Johan Cruyff y García Soriano entregaron un ramo de flores a la Maja de Murcia, María del Pilar Lamas, una tarde lluviosa de mayo en La Condomina, en 1975. Decían siempre los sabios de la vieja grada lateral que aquellos homenajes, saques de honor, entrega de flores o aplausos a personalidades eran gafes para el Murcia. Siempre que había algo antes del partido nos marcaba el rival antes del cuarto de hora y ya se ponía todo cuesta arriba. Siempre pensé que era algo que hacemos mucho en Murcia, ponernos la tirita antes de la herida, pero lo cierto es que aquel día en el minuto 15 ya ganaba el Barcelona 0-1, y aunque las crónicas culpan más a la lluvia y al terreno de juego pesado, y atención, esto es inaudito (qué raro sería hoy) a la actuación del árbitro balear que no pitó fuera de juego en aquel gol, quien te dice a ti que no fue cosa del ramo de flores.

Elting, Laredo, Barreda, Lerma; Camino, Murciano; Angelín, Naharro; García Soriano; Pelegrín y Cristo. Aquel era el once en el que debutó el jugador más joven aún hoy en vestir la camiseta del Real Murcia en Primera División. Un zagal de Beniaján de 16 añicos que hizo la mejor jugada del partido con un centro claro y preciso tras amago que García Soriano no aprovechó€ Después Neskens hizo lo mismo que él y Cruyff sí aprovechó su pase marcando el 0-2. «Nos falta un delantero centro que meta los goles», declaró José Víctor tras el partido. El fútbol ya era entonces una cosa de marcar goles o no marcarlos, como lo sigue siendo hoy, por mucho que se empeñen algunos en darle categoría de ciencia. «Pelegrín puso ganas, amagó bien, de acuerdo con sus características», dijo el entrenador.

Aquel día Pelegrín fue noticia por ser el jugador más joven de la categoría y por su atrevimiento en el campo. Le auguraban un futuro prometedor, como no podía ser de otra forma. Nunca vi a Pelegrín jugar. Pero sí a otros muchos jugadores que debutaron como él, con un gran porvenir y el aplauso y regocijo de la grada por ver a uno de los nuestros con la camiseta grana. Durante años escuché su nombre en la Lateral, cada vez que algún jugador hacía un regate espectacular o una internada de esas que salen por confianza y atrevimiento€ «parece el Pelegrín», decían. Hoy el Real Murcia homenajea a Pelegrín, recientemente fallecido, y quienes no pudimos verle, pero le hemos visto en la piel de cientos de canteranos que han tenido un gran futuro, le recordaremos con la esperanza de que sean muchos los que nos recuerden a Pelegrín, y de una vez por todas, cumplan un sueño que sigue ahí, por mucho que se aleje un play off.

Gracias, Pelegrín. Vale.