Pruebe a decir eso que tanto se ha oído en los últimos días, en Palma y más allá „que la justicia es igual para todos„ pruebe a hacerlo sin que el aliento se le escape explosivamente por las comisuras de la boca, con ligeras, y liberadoras, convulsiones de los abdominales. Si lo consigue decir mientras exhibe la cara de palo y la mirada de pánico (una cosa no quita la otra) del más famoso registrador de la propiedad de las Españas, entonces usted acredita altos niveles de madurez (la pasas de Gata de Gorgos tendrán más jugo) y responsabilidad (tan responsable, al menos, como aquel Banco de España que bendecía el saqueo de los abuelitos con las preferentes de Bankia, un modelo).

Y es que como empezamos con esto de la democracia más tarde, incluso, que Portugal y Grecia, se nota que tenemos las ganas de mejorar, cuando las había, de los jornaleros que acuden a clases nocturnas de Bachillerato. Unos años más y daremos lecciones de inglés y liberalismo. Por ejemplo, no hay la más mínima duda que las cuentas de Jordi Pujol en Andorra fueron un arranque de patriotismo, un apoyo a la proyección internacional de la lengua catalana, aunque también es cierto que cada vez que se alude a las cuentas del rey emérito en Suiza se discute si nacieron así de pingües o fueron creciendo con los años, pero no lo que es obvio: que los Alpes son el mejor lugar para dar muestras de patriotismo, de modo parecido a las islas Vírgenes, que es donde tienen cuenta abierta las pililas financieras más promiscuas, no quiero señalar.

No deduzcan que soy un republicanote feroz, mi republicanismo es como el de Santiago Carrillo „preventivo„ como cuando le dijo a don Juan Carlos: «Si Su Majestad sale por piernas, yo habré salido mucho antes». No se dejen llevar por el desánimo. Miren a Isabel Bonig que, llena de entusiasmo patriótico, se opondrá al corredor mediterráneo si Cataluña se proclama independiente. Eso, cortemos las comunicaciones con Francia por habernos invadido y con Bosnia por musulmanes. Recemos por la confusión del turco y la conversión de los judíos relapsos, amén.