Ya sé que se nos llama ´gramanazis´ a quienes andamos a vueltas con el imposible afán de que el idioma español se lea y escriba en idioma español. La verdad es que no me veo en uniforme de las SS, pistola inquieta al cinto y encefalograma plano y ario, gaseando a quienes escriben ´vurro´ con ´v´, internando en campos de concentración a los leístas, obligando a llevar en la solapa una ´A´ amarilla de ´analfabeto´ a quienes confunden el complemento directo con el circunstancial, invadiendo los países que no tienen ´ñ´ en sus ordenadores. Pero sí me encabronan los poderes públicos cuando hacen dejación de sus funciones ortográficas y se dejan caer en brazos de muchos diseñadores gráficos, esa nueva peste, para eliminar tildes, por ejemplo.

Me pregunto qué demonios les habrá hecho la pacífica tilde a esos señores, cuando sólo se trata de una virgulilla (o sea, un signo ortográfico de forma de coma, rasguillo o trazo) que se pone sobre algunas letras para denotar su acentuación o para distinguirla de otras, como el sombrerito de la ´ñ´ para diferenciarla de ´n´, que no son lo mismo ´mona´ que ´moña´, ´cano´ que ´caño´, ni un ´cono´ que un ´coño´, digo yo. Pero ahí están dale que dale los ´diseñonazis´, cobrando una pasta del contribuyente y justificando ante los políticos analfabetos funcionales sus ocurrencias de pintamonas a base de que donde esté el diseño, que se quite la ortografía. Ya dio la nota Telefónica con su famoso ´Telefonica´, por mucho que los estilistas hayan ido estirando de a poquitos la ´f´ para cubrir su error inicial, y la sigue dando con su ´RECARGAME´, que valdría en la Argentina, pero que aquí es ´RECÁRGAME´. Dice una placa chovinista en Alcázar de San Juan: «En esta casa situada en este mismo lugar nacío Miguel de Cervantes», como recoge una web benemérita, defensora de la correcta acentuación. No tiene desperdicio la bobada: ni Cervantes ´nacío´, ni Cervantes nació en Alcázar de San Juan, ni las casas son muebles que necesiten especificación de que están situadas en el mismo lugar en que están situadas. ´JAEN, COLEGIO PUBLICO´, así de mayúsculo escribe sus dos errores por ausencia de tildes un colegio público de Jaén. Y hay una consejería de Educación que afirma en sus panfletos pertenecer a la JUNTA DE ANDALUCIA, país acaso ficticio, inexistente, a no ser que quisieran decir ´ANDALUCÍA´, con tilde sobre la vocal débil del hiato.

Estos ejemplos proceden de la ignorancia. Se ha transmitido por quién sabe qué maestros analfabetos que las mayúsculas no se acentúan, y tamaña majadería se mantiene, dura y dura, a pesar de que la Ortografía de la Real Academia es diáfana al respecto: «Las mayúsculas llevan tilde si les corresponde según las reglas». Y remacha, por si alguien no se ha enterado: «La Academia nunca ha establecido una norma en sentido contrario». Nunca es nunca, jamás. No cuesta ningún trabajo aceptar y cumplir unas normas ortográficas tan sencillas como democratizadoras.

Pero sigo leyendo gracias a nuevos logotipos, muy bien nazidiseñados, que hay una ´JUNTA DE CASTILLA Y LEON´, en vez de ´LEÓN´; y que el ´AYUNTAMIENTO DE MALAGA´, nada de «MÁLAGA´, tiene un ´AREA DE MEDIO AMBIENTE´ y no un ´ÁREA´. La última memez ágrafa que me ha sido dado sufrir la protagonizan ciertos responsables sanitarios con el siguiente pasquín: «Frente a la gripe tipo A SI PODEMOS PREVENIR». El ignaro que lo diseñó no vale (contrátenme a mí), porque no sabe ni que hay tildes, ni que hay comas, ni que hay dos puntos. Le bastaría con haber escrito (o diseñado): «Frente a la gripe tipo A: SÍ PODEMOS PREVENIR» o «Frente a la gripe tipo A, SÍ PODEMOS PREVENIR», y todo correcto. Pero quién sabe lo que pasó por su cabeza, porque tan confusa parece tenerla que, a lo peor, quiso escribir: «Frente a la gripe, tipo, ASÍ PODEMOS PREVENIR». Pero, claro está, el diseño queda guay, hay buen rollito, mejor talante, y a la ortografía que le vayan dando por las tildes.