Casi siempre hemos visto que los jueces condenan siguiendo la petición fiscal o, incluso, rebajan lo que pide el fiscal; en cambio, el juez del juzgado de instrucción de Mula número 2 ha actuado de manera totalmente diferente y nos ha condenado a cinco personas miembros de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas, PAH, a tres meses de multa en vez de un mes, que era la petición fiscal, porque considera que la solidaridad, el estar al lado de la gente que sufre los procesos injustos de los desahucios desde la no violencia, el reclamar el derecho de la gente a poder reiniciar sus vidas sin deuda, era merecedora de la máxima pena. Menos mal que hay otros jueces que tienen otra sensibilidad judicial y humana muy distinta, totalmente distinta.