En el ala Oeste de la Casa Blanca, The White House, me cuentan que el trasiego de muebles, de un lado para otro, es un no parar desde el pasado fin de semana; me cuentan que desde la Plaza Roja de Moscú se escuchan los martillazos de las reformas que se están haciendo en el Krelim, Kryeml; me cuentan que en el Palacio del Eliseo, en París, han desalojado toda la planta de arriba y la están preparando para los nuevos huéspedes; me dicen que aquí, en España, el chalecito que hay en los jardines del Pardo también está siendo adecuado, y que en Alemania, ´la Merkel´ anda inmersa en la búsqueda de un alojamiento que esté a la altura de la llegada. Me dicen que no hay un lugar en el planeta donde no estén a la espera de recibirlos. ¿Pero qué has hecho, Francisco? ¡Pero qué has hecho!
