Pozo Estrecho es una diputación cartagenera que fue creciendo en torno a un pozo situado en la antigua vereda de La Mesta, camino que utilizaban los ganados trashumantes del centro de la Península, y que terminaba en la explanada de San Ginés de La Jara. Se sabe de restos de villas romanas en su entorno, no en vano está situado junto al cauce de la rambla de El Albujón que, como las demás de la Comarca, era aprovechada desde antiguo para extraer y embalsar agua para su uso humano y agrícola. Probablemente los asentamientos continuaron en la época árabe, pero se desconoce cuál sería la denominación del pueblo en esa lengua. Lo que sí está atestiguado es que hay textos de reparto de tierras en 1505 y 1515 en los que aparece «Pozo Estrecho», con lo que, al menos, hablamos de una historia de más de 500 años.

Desde entonces, Pozo Estrecho tuyo un papel mucho más relevante en el campo de Cartagena del que tiene hoy día. No hay lugar ahora para hablar de ello, sólo citar que fue la primera parroquia en el mundo que se erigió en 1699 en honor del santo cartagenero Fulgencio, cuya festividad se celebra el 16 de enero. Aquella extensa parroquia fue la primera en segregarse de la, hasta entonces única, parroquia de Cartagena. Comprendía una importante zona, aglutinando a las localidades de El Albujón, La Mina, Santa Ana, La Aljorra, Los Puertos, La Magdalena, etc. Tras la Constitución de Cádiz, en 1812, esta zona del campo de Cartagena se convirtió en ayuntamiento propio, haciendo valer Pozo Estrecho su identidad y liderazgo rural frente a la ciudad, continuando su influjo hasta mediados del siglo XX.

Los habitantes de Pozo Estrecho son conocidos como 'galileos', un gentilicio para el que muchos han buscado explicaciones lógicas o legendarias. Hay quienes utilizan un dicterio que, fruto de las rivalidades de los pueblos vecinos, habla de que en una antigua procesión de un cristo yacente, un carpintero, a última hora hizo una urna que resultó pequeña y que, de manera provisional, tuvo que resolver la situación con una sierra, cortando los pies a la talla del Cristo. Los pueblos vecinos, según esta tradición, empezarían a mofarse diciendo «sois unos judíos», «sois unos galileos»?

Personalmente creo que esta explicación no se sostiene, porque si es cierto que fueron los judíos quienes crucificaron a Jesús, realmente el galileo era él, con lo cual no casa. Hay quienes dicen que la samaritana que dio agua de un pozo a Jesús, con el tiempo se vino a vivir a España y pasó por estas tierras y el pozo de Pozo Estrecho? Tampoco me cuadra esta leyenda porque no se diría galileos sino samaritanos?

Galilea es una localidad de La Rioja con la que, desde 1998, Pozo Estrecho está hermanada. Aquellos galileos riojanos llevan en su escudo una 'galilea' que es un pórtico techado que, frente a las iglesias, servía de lugar de reunión de los vecinos. Sabiendo que todas las grandes ocasiones se celebraron en la Iglesia, incluida la constitución el 30 de mayo de 1913 de su primer ayuntamiento, creo que esta puede ser la razón más objetiva.

Lo cierto es que los vecinos están orgullosos de ser galileos y de celebrar estos días unos actos entrañables en torno a su Patrón. Destaca la procesión que lleva a cabo la hermandad de San Fulgencio y la banda Santa Cecilia, que fue recuperada con los actos del III Centenario de la Parroquia y, sobre todo, la citada y multitudinaria degustación de pelotas. Fue tras la fundación en 1968 de la asociación de vecinos cuando se abrió a todos la costumbre de siglos de dar de comer estas albóndigas a las autoridades y visitantes destacados de la ciudad. Ahora son miles de personas los que vienen de toda la comarca y son agasajados por el trabajo de la asociación de Amas de Casa, las peñas de la comisión de fiestas y de todo el pueblo.

Pozo Estrecho puede presumir: sus pelotas vienen de antiguo y son las mejores, así le pareció a El Patiñero que solía trovar en estas fiestas y que se llevó esta tradición a Murcia.