Queridos reyes magos, para este 2016 me gustaría que regalaras un poco de decencia tanto a nuestros gobernantes electos como a los empresarios de esta nuestra querida España. Para que se den cuenta de que lo que le preocupa a la gente es tener un puesto de trabajo que le permita vivir con dignidad, sin tener que buscar dos e incluso tres empleos para ser algo más que un mil eurista. Porque no hay mayor injusticia que la de ver que una persona quiere prosperar y no puede. Quiere darle lo mejor a los suyos y no puede. Trata de tener una vida social y no puede. Trata de hacer algo útil con su(s) nómina(s) y no puede... Y si no es posible, me gustaría que, al menos, quienes achacan todo a la crisis mientras ellos se llevan varios miles de euros al bolsillo y tienen en sus manos los poderes de decisión, vivan la situación de los nuevos trabajadores precarios en sus propias carnes o les hagáis pensar si ese empleo que ofertan se lo darían a sus hijos para que se realicen como personas y como trabajadores.