Con motivo de las V Jornadas Gastronómicas Asturianas, que organiza en Águilas el ayuntamiento y el restaurante asturiano Casa Menéndez, se otorgaron los Premios Fabas de Oro 2015. A los premiados de este año van dedicados estos versos.

Me resulta más que grato

que en esta convocatoria,

en su quinto año de historia,

haya Fabas para rato;

importantes, muy notorias

y me parece de gloria

que en lugar de dos sean cuatro.

El que la lleva la entiende

y sin duda es gran jurado

este de Casa Menéndez

pues los premios los ha dado

con acierto plenamente.

Con satisfacción yo veo

las Fabas de dos mujeres.

Grandes valores sugieren,

merecedoras las creo€

Son Josefa Millán Pérez

y Chelete Monereo.

Josefa, gran cocinera,

una estupenda hostelera

muy querida por su gente

y en todo Puerto Lumbreras;

como esposa es excelente,

como madre ya es la pera

como abuela, lo siguiente,

como mujer€ ¡de bandera!

Y Chelete, gran pintora,

una auténtica señora,

pura elegancia y dulzura,

entrañable, encantadora

y maga de su pintura,

escenógrafa, escritora€

Otra mujer que enamora

por su encanto y su ternura.

Y me alegro claramente

que otra Faba de Oro sea,

y muy acertadamente,

para Martínez Gadea,

para ese genial Vicente,

pintor y artista eminente

de fantásticas ideas

y arquitecto sorprendente.

Y Faba muy especial

de altísima distinción

y que toda esta Región

sin duda celebrará,

es la Faba que le dan

a ese magnífico actor,

heredero y sucesor

de don Francisco Rabal,

de lo bueno lo mejor,

que es Ginés García Millán.

¡Vivan los Fabas de Oro!

¡Vivan Bautista, Teresa,

Murcia y Asturias, tesoros

grandes de la buena mesa!

¡Vivan los premios bien hechos

con gracia, postín e ingenio!

Y si alguien, con más derecho

de las fabes en el gremio

quiere optar a mejor premio

que venga aquí a dar el pecho.

Y quien de fabes esté

más repleto, más consiga

o más fabes Dios le dé

¡San Pedro se las bendiga!