Colau, la ignominiosa alcaldesa de Barcelona, arremetió contra el Día de la Hispanidad con una calumnia: «Vergüenza de Estado aquel que celebra un genocidio». Carlos Bardem, hermano del oscarizado, dice que la Fiesta Nacional es una manera de tapar la miseria con vivas a España, y en esa demagogia medra. El indocumentado e indecente alcalde de Cádiz, José María González, ha descubierto que España no descubrió América y que masacramos y sometimos un continente y sus culturas en nombre de la cristiandad, si bien no reniega de su nombre, José y María, padres de Jesucristo. Al actor Guillermo Toledo le da cagalera la conquista, pero se caga de gusto por ponerse ´Willy´, que suena a los que sí masacraron el lejano Oeste americano. Hay vertederos, grandísimos cubos de basura, que están hasta los topes; lástima que no podamos acoger en su seno a estos personajes.