Se dice, comúnmente, que uno se ha pegado un tiro en el pie cuando en el transcurso o avance de un determinado proyecto se equivoca en una determinada acción y da lugar al retraso o a la ruina de lo proyectado.

El ejemplo más sencillo es el del miembro de un Ejército que ha de luchar por conseguir alguna cota u objetivo. Si existe miedo o cobardía, a alguno se le ocurre pegarse un tiro en el pie. Se va al hospital y deja que los demás lo arreglen, si pueden.

Otro ejemplo sencillo es lo que nos pasa a los españoles, en general, y a los murcianos, en particular, cuando debemos de luchar por algo importante y que se está cerca de obtener. Con gran frecuencia, nos pegamos un tiro en el pie para que no salga. Nos está pasando con la llegada del AVE, con la puesta en marcha del Aeropuerto de Corvera, con el Puerto del Gorguel, con la dichosa curva del ferrocarril en Camarillas, etc...

Actuamos, a veces, como si la inteligencia sumada e integrada de un millón y medio de murcianos valiera menos que nada. ¿Es que, entre tantos, a nadie se le ocurre una solución al agua del Sureste de España? ¿Es que solo podemos quedarnos en una postura de pedir lo que creemos que es nuestro, sin aportar nuevas iniciativas que sean válidas para todos?

El otro día hablaba en una de estas tribunas de cómo, a veces, hay que analizar el problema desde otras perspectivas muy distintas a las que actualmente se hacen. Porque nos estamos dando continuamente tiros en el pie.

Puse como ejemplo, la solución a la curva de Camarillas, conjugando el Presupuesto del Puerto de Cartagena con el Plan Juncker y alguna cosa más. Es de aplaudir. Y mucho. Es un caso a copiar en otros temas. Hablé de tres personas, que suponía habían hecho mucho por la solución. Lo mantengo, pero me he informado de que el principal muñidor de la solución es José María Albarracín, presidente de CROEM.

Desde que llegó José María Albarracín, la patronal dispara, aún más que antes, por elevación, como los buenos artilleros. Sabiendo que su acción llegará más lejos. Son muchos los temas en los que se ha comprometido. Y muchos de ellos los ha solucionado. A base de analizar con otra perspectiva la realidad, la cual ha estado demasiado tiempo con muchos tiros en el pie, sin pensar que existen otras muchas soluciones para nuestros problemas. Solo hay que ponerse a pensar.

Seguro que hay muchos José María Albarracín en Murcia. No todos los líderes deben de venir por la vía de la política.

Y guárdense la pistola y practiquen la artillería.