Expresión muy manida, sobre todo en niños o adolescentes, que de algún modo han dejado de hacer eso que les gusta para pasar a hacer aquello que les molesta, o simplemente, no hacer nada. Entonces declaran su aburrimiento a los cuatro vientos y ponen el peso de la responsabilidad de tal síntoma en los papás, que gracias a ello, deben ponerse a crear o pensar alguna solución inmediata para mitigar el disgusto de sus hijos.
¿Y si nos anticipamos a ese momento, y hacemos que esa creatividad encomendada a los padres, pase a sus manos? Para nada se trata de tirar balones fuera; sino de un ejercicio esencial para su propia educación social. Deben ser ellos, poco a poco, los que vayan encontrando aquello que les hace sentir bien, y que sean capaces de descubrirlo cuando aparece el aburrimiento.
Ya sea un juguete, un libro, una película, un dibujo, una historia, etc. todo es válido, siempre y cuando el niño vea reflejados su entusiasmo y sonrisa en lo que se presta a hacer.
Por arte de magia no se consigue; dependiendo sus edades, habrá que acometer unas u otras herramientas; ya que con niños de menor edad, es imprescindible ofrecerles todo y cuanto tengas a la mano (lo más sencillo posible) para que su respuesta en cuanto a gestos, te indique que vas por buen o mal camino; y dependiendo de ello, sabrás otorgar a su alrededor, físicamente hablando, aquello que realmente les hace sentir bien. Ejercicio de observación, y puesta en práctica.
En adolescentes, es evidente que no funciona aquello que hace algunos años les hacía sentir ocupados durante varios minutos. ¿Y ahora qué? Por ejemplo; ¿podríamos invitarles, en un primer gesto, a que escriban en una lista larguísima€ tantas actividades como aquellas que les gustan hacer? Al principio no hay muchas ideas, para eso ya estás tú, para abrirles la mente y ayudarles. Lo bonito es que sean ellos, precisamente, los que escriban y diseñen esa lista para que€ simplemente después acudan a ella para esos momentos de hastío. ¿Y tú, has empezado a practicar ya con tu lista? ¿O qué haces cuándo te aburres?
