El traje de novia, los dinosaurios, el bocadillo de mahonesa, la tercera teta, el pavo en la cabeza, el gato apestoso, la carta y el «nos estábamos dando un descanso», la limpieza compulsiva, el dr. Ramoray, la novia con pierna ortopédica, el mono Marcel, los trillizos, la escoba del vecino, la boda en Londres, el rizador de pestañas... Si en la segunda línea ya sabes de qué estoy hablando es que eres de esas personas que ha pasado los últimos veinte años viendo la serie Friends. Porque puede que haga diez que dejara de grabarse, pero, afortunadamente, no hemos dejado de verla ni de reírnos con ellos. Ross, Rachel, Phoebe, Mónica, Chandler y Joey forman parte de nuestra memoria colectiva como pocos personajes de ficción televisiva. No importa las veces que hayas visto el capítulo, siempre se te escapa una carcajada. Cuando todavía no sabíamos que las series cambiarían nuestra forma de entender el ocio, ellos ya habían hecho historia y nos decían eso de... ´I´ll be there for you´.