Sigue siendo un pozo de píldoras curiosas El buen uso del español, recién editado por la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española. Todo sea por que hablemos mejor, es decir, por que comuniquemos mejor lo que queremos decir. Acompáñeme el lector, si gusta, por algunas de ellas y llévese la discusión sobre las mismas a la gente, dueña al fin del idioma.

1. A la Real Academia (RAE) no le gusta «piercing». Recomienda, por el contrario, «pirsin», nadie sabe con cuánto éxito.

2. He visto muchas veces acentuado el hipocorístico «Rociíto»: no debe llevar tilde, debe ser «Rociito», palabra llana (o «paroxítona », si alguien quiere dárselas de muy culto) terminada en vocal.

3. La «o» no se acentúa entre cifras: jamás. «Terminaré dentro de 25 o 30 días» y no «terminaré dentro de 25 ó 30 días». Se acabó aquella norma de poner la tilde cuando va entre cifras.

4. Pregunto: ¿Es preciso utilizar casi veinte páginas para explicar el uso de las mayúsculas? ¿No habría manera de simplificar las cosas? En realidad, para dejarlas al fin poco claras, pues en la portada del volumen con sus normas ortográficas escribe la RAE Ortografía de la lengua española, con las minúsculas que no usa en el libro que cito: «Asociación de Academias de la Lengua Española », con mayúsculas.

5. Cuando lean ustedes «impulso motriz», sepan que es incorrecto. Usen «impulso motor».

6. ¿Debo pedirle al camarero unos «cacahueses » o unos «cachuetes»? Pídanle lo segundo, por favor, porque lo primero no existe.

7. Antes se decía «insignia»; ahora, «pin». ¿Y en plural? Parecería que «pins», pero no. La RAE prefiere «pines», aunque no sé si los hablantes estarán mucho por las labor de decir cosas como «llevaba varios pines en la solapa ». ¿No suena raro?

8. No quede mal, al menos con los académicos, diciendo que está preparando unos «sandwichs». Diga, aunque le cueste, «sándwiches » y les parecerá mejor porque es lo correcto.

9. ¿Les gusta a ustedes más el «arco-iris», con guion (palabra esta, no lo olviden, que ya no lleva tilde) o el «arcoíris»? Pueden elegir observarlo como quieran, valen las dos formas.

10. La RAE intentó que abandonásemos el «whisky» y tomásemos «güisqui». Al no haber triunfado la propuesta, deja las cosas a medio camino y recomienda que nos pasemos al «wiski».

11. Se suele decir que son «las doce de la noche» y todos nos entendemos. Pero no olviden ustedes que «Las 24:00 h del día 31 de diciembre» es exactamente la misma hora que «las 00:00 h del día 1 de enero».

12. Yo prefiero la forma grave «ole». Pero mis compañeros de Corrección acostumbran sustituírmela por «olé», aguda. Es cuestión de preferencias, se admiten las dos. Igual ocurre con «uy» y «huy», a gusto del consumidor.

13. Ríanse por escrito así: «Ja, ja, ja, ja, ja». Les llamarán incorrectos si se ríen con «jajajá».

14. Los de Ucrania son «ucranianos», aunque algún periódico prefiera «ucranios». Los de Damasco, «damascenos» o «damasquinos ». Los de Río de Janeiro, «fluminenses». Los famosos bandoleros apodados «Los siete niños de Écija» (eran más) podían haberse llamado «Los siete niños astigitanos». Y el gentilicio de quienes son de Liechtenstein es «liechtensteinianos» (a ver quién es el valiente que lo pronuncia de corrido).

15. Da lo mismo «Rumania» que «Rumanía»; «píxeles» que «pixeles»; «travesti» que «travestí»; «isobara» que «isóbara»; «Sáhara » que «Sahara». Y, asómbrense, vale escribir «misil» o «mísil». Y así más de sesenta palabras con doble acentuación. La Academia hila muy fino o muy basto.

16. Si un «profesionista» (lo mismo que «profesional») que actúe como «conferencista» (lo mismo que «conferenciante») habla de los «alcoholistas», no se refiere a una secta, sino a los «alcohólicos».

17. Está de moda la preposición «vía»: «Volaron a la Argentina vía París». Pero, si pueden, eviten (dice la RAE) construir las frases con «por» más «vía» más un adjetivo. O sea, no diga ni escriba que el rescate se hizo «por vía aérea», sino «vía aérea». Ya ven.