El curso 2010/2011 llega a su fin. Un curso marcado por los recortes en el sector educativo que ha motivado la mayor movilización social nunca vista antes entre los miembros de la comunidad educativa. Padres y madres, alumnado, personal de administración y servicios, y profesorado hemos remado juntos en la defensa de la escuela pública y en contra las políticas de recortes en materia educativa.
Si este curso que ahora termina se puede calificar de algo, es de compromiso por parte del profesorado de la Región de Murcia que ha expresado de forma pacífica su desacuerdo con las políticas de recorte desarrolladas por el Gobierno regional. Cuando el pasado 21 de diciembre se anunció el recorte en materia educativa, y su consiguiente aprobación dos días después en la Ley de Medidas Extraordinarias, muchos alzaron la voz en contra del profesorado argumentando que se movilizaba por la pérdida de 175 euros en su nómina mensual. Cantidad que fue reducida a 75 euros tras reconocer el Grupo Parlamentario del PP que se debía a un ´error tipográfico´ y que finalmente se quedó en 37,5 euros. Sin embargo, a pesar de los recortes en la nómina mensual, el profesorado ha continuado movilizándose en defensa de la unas condiciones dignas que permitan atender los retos que plantea el sistema educativo actual.
Durante años hemos asistido por parte de la consejería de Educación a campañas publicitarias, pagadas con dinero público, que tenían por finalidad reconocer la labor social que los profesores y maestros desempeñamos con nuestro trabajo diario. Sin embargo, en cuanto empezaron a aparecer las dificultades económicas motivadas por un modelo económico insostenible y una pésima gestión de los recursos públicos, las políticas del Ejecutivo de Valcárcel se orientaron hacia los recortes en los servicios públicos, y entre ellos, el de la Educación.
El profesorado y personal no docente de los centros educativos, lejos de quedarse con los brazos cruzados, se han movilizado como nunca antes se había visto en esta Región. Bajo ese lema que se ha trasladado a todos los centros escolares, «Más recortes en Educación, menos futuro en la Región», se ha comprometido con gran ahínco en la defensa de la escuela pública. A pesar los intentos de denigrar la labor docente por parte de la Administración, el profesorado ha seguido con el cumplimiento de la programación docente y con el deber que todos los docentes vocacionales tenemos. Un deber que es un compromiso con la sociedad en un acto de entrega de nuestro saber a los demás con la finalidad de enseñar a pensar, a reflexionar, a ser críticos y creativos a nuestros alumnos y alumnas. En resumen, dotarles de las principales herramientas para llegar a ser personas autónomas, libres e integradas socialmente.
Es cierto que en los últimos tiempos se ha generalizado la crítica a la escuela pública, y especialmente a los docentes. Se nos critica por exceso de corporativismo, por el exceso de vacaciones, por nuestro salario y por otras muchas razones que ponen de manifiesto el desconocimiento que existe en parte de la sociedad hacia la labor que desarrollamos. Sin embargo, el profesorado murciano lejos de detenerse y resignarse, ha demostrado en este curso que a pesar de que el Gobierno regional orienta la escuela pública hacia la privatización, el profesorado no se para y se moviliza en defensa de una escuela pública de calidad donde tengan cabida todos y todas, donde no existan diferencias, donde se dote a los centros educativos de los medios y recursos necesarios para sacar de nuestros niños y adolescentes lo mejor de sí mismos.
Ahora ha terminado el periodo lectivo y nuestros alumnos abandonan las aulas, pero el profesorado continúa ahí trabajando en la soledad de sus centros. Elaborando memorias e informes sobre los que construir la programación del próximo curso escolar, recogiendo el material didáctico utilizado en el aula, evaluando la labor desarrollada, analizando los aciertos y errores y, mientras tanto, nuestros gobernantes seguirán pensando como ajustar las cuentas públicas a costa de reducir profesorado, incrementar el número de alumnos por aula y eliminar apoyos y medios a los centros educativos. Este es el modelo educativo contra el que los docentes nos hemos movilizado y seguiremos haciéndolo a pesar de los intentos de desprestigiar nuestra labor.
Desde FETE-UGT deseamos que el nuevo Ejecutivo murciano sepa estar a la altura de lo que demandan los trabajadores de la escuela pública, pues este es el verdadero sentido que tiene la profesión docente y el verdadero fundamento para entonar el «Gracias, maestro; gracias, maestra».
