España busca esta tarde, a las 19.30 horas, las semifinales del torneo olímpico de Río de Janeiro ante Turquía con ánimo de revancha porque fueron las dirigidas por Lucas Mondelo las que le apartaron hace dos años de la final del Mundial de su país en el Fenerbahce Arena de Estambul.
El propio técnico español fue el que recordó las «muchas cuentas pendientes» entre ambos equipos desde el 66-56 de aquel 4 de octubre de 2014, en la capital turca, con especial protagonismo de Alba Torrens, que terminó el partido con 28 puntos, 6 rebotes y 27 de valoración.
En esta fase de la competición los partidos se disputarán en el Carioca Arena, donde ayer las jugadoras de la selección entrenaron. «Primer entrenamiento en Carioca, cogiendo sensaciones. Mañana es el día», escribió la murciana Laura Gil en su cuenta de Twitter junto a una foto en el centro de la cancha olímpica.
No estará esta vez el segundo gran baluarte del conjunto español, la lesionada Sancho Little (18, 12 y 24), una baja de consideración que la selección ha conseguido suplir en una primera fase del torneo olímpico que llevó al milímetro conforme a los objetivos marcados.
«Estamos donde queremos», fue una de las frases más repetidas por las jugadores españolas, a medida que se deshacían de Serbia, en la su primera final en Río, de China, de Senegal y finalmente de Canadá en el partido por el segundo puesto del Grupo B.
Y como premio a todo ese exitoso recorrido, con el paréntesis de una contundente y prevista derrota contra Estados Unidos, España evitará al laureado e inaccesible Team USA -cinco oros consecutivos y cuarenta y seis victorias seguidas en los Juegos- hasta una hipotética final.
En el plan previsto por Mondelo y sus jugadoras estaba también Turquía en cuartos, el choque del cruce que da la nota al torneo, sobresaliente si se gana y un poco decepcionante si se pierde.
«Las tenemos muy estudiadas y de todas las rivales las hubiese elegido a ellas», no tiene problema en reconocer Laura Nicholls, la jugadora interior clave de la Roja. «Si alguien nos hubiese dicho que íbamos a jugar unos cuartos de final contra Turquía, creo que todo el mundo hubiese estado de acuerdo», ahondó Laia Palau.
Una vez abandonado, tras la primera fase, el Arena de la Juventud en Deodoro por el Carioca Arena, reconocen que Turquía será una rival complicada y a temer, entre otras cosas por el estilo «a la griega» que tiene, explicó Mondelo.
El técnico español, en todo caso, también tiene confianza para el partido. «Turquía nos corta el ritmo y no nos deja correr, pero haremos lo que siempre hemos hecho, adaptarnos al partido. Lo competiremos seguro y si lo compites lo puedes ganar», avanzó el seleccionador.
El peligro turco se concentra fundamentalmente en la zona, en la pareja de pívots Nevriye Yilmaz (1,92) y la nacionalizada Lara Sanders (1,91), que anotaron 36 puntos en la semifinal mundialista de hace dos años y están siendo las mejores también durante los Juegos de Río.
