El líder de Podemos, Pablo Iglesias, y la portavoz en el Congreso, Irene Montero, han salido al paso ante las críticas por comprarse un chalet de 600.000 al defender que a los cargos públicos hay que criticarles por sus políticas o "corrupción" y no por gastar su dinero en lo que quieran "de forma honrada".

En un comunicado conjunto que ambos dirigentes políticos han difundido en las redes sociales, Iglesias y Montero explican los detalles de la compra de esa vivienda que ha sido motivo de polémica en las últimas horas.

Se declaran conscientes de que su decisión de entrar en política implicaba que cada aspecto de su vida esté sometido "al escrutinio público", y por ello han decidido explicar los detalles de su decisión de comprar un chalet unifamiliar en la localidad de Galapagar, a 40 kilómetros de Madrid.

Informan de que para pagar la vivienda han pedido "a medias" una hipoteca de 540.000 euros a 30 años, que pagarán al mes algo más de 800 euros cada uno y de que después de firmarla el pasado 9 de mayo entregaron una nueva declaración de bienes en el Congreso.

La entrada de la hipoteca y las reformas las han costeado con una parte de sus ahorros, según explica el comunicado, en el que detallan que Montero ha necesitado pedir un préstamo a su padre, y que los padres de Iglesias, que "han ganado más", "le dejarán una herencia" que les ayudará.

Iglesias recuerda que, además de su sueldo de diputado, presenta dos programas televisivos (Fort Apache y Otra Vuelta de Tuerka) y recibe derechos de autor por los libros que ha escrito, todo ello declarado en el portal de transparencia de Podemos y al Congreso, que ha autorizado sus actividades.

"Sabemos que muchas familias españolas, incluso con dos sueldos, no pueden permitirse una hipoteca así, y por eso entendemos que es tan importante defender salarios dignos para todos y todas", afirman tras admitir que sus sueldos les han permitido "emprender ese proyecto".

Asimismo, aseguran: "Basta ver los precios de la vivienda en Madrid para saber que elegir un sitio para construir un hogar no es una tarea sencilla para la mayoría de españoles y españolas, y por eso también decidimos buscar más cerca del campo".

Iglesias y Montero defienden su derecho de poder cuidar a sus hijos (esperan gemelos para el próximo otoño) "con algo de intimidad", lo que creen que pueden conseguir en Galapagar, donde además -dicen- viven muchos de sus amigos.

"Para nosotros es difícil no llamar la atención desde el momento en que pisamos la calle y nos gustaría que nuestros hijos puedan vivir su infancia de la forma más normal posible", continúan.

En el comunicado salen al paso también de las críticas que hace seis años lanzó Iglesias a un ministro (Luis de Guindos) por comprarse un ático de 600.000 euros.

"Ambos pagaremos en 30 años, algo más de la mitad de esa cantidad cada uno. Y lo pagaremos para comprar una casa en la que vivir, no con la que especular. Y en todo caso siempre hemos afirmado que a los ministros y a cualquier cargo público hay que criticarles por sus políticas o eventualmente por su corrupción, no por gastarse su dinero en lo que quieran mientras lo hagan de forma honrada", subrayan.

En cualquier caso, sostienen que los cargos públicos deberían tener sueldos más ajustados y, por ello, en Podemos tienen establecido que deben cobrar tres salarios mínimos.

Por último, critican que se invada su intimidad con la publicación de fotos de su casa, o incluso de sus visita al hospital para una revisión ginecológica, algo que temen que "no se hace con otros representantes públicos".

"Asumimos que con nosotros funcionan reglas diferentes que con los demás. Sabemos por qué es. También por eso queremos vivir más cerca del campo. Sabemos que nos criticarán hagamos lo que hagamos. Nosotros seguiremos haciendo nuestro trabajo lo mejor que sabemos y construyendo un proyecto de vida que nos hace felices", concluyen.