La Guardia Civil recabará hoy documentación del 1-O en el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) de la Generalitat, en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), que los agentes dejaron sin servicio antes de la celebración del referéndum para impedir el voto telemático y el recuento.

El registro al CTTI, según han informado a Efe fuentes de la investigación, ha sido ordenado por el titular del juzgado de instrucción número 4 de Lleida, que ayer mismo también requirió a la Guardia Civil a personarse en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de esta provincia para obtener las grabaciones de la centralita de comunicaciones y volcar el contenido de los teléfonos móviles de dos mandos.

"Dentro de la causa secreta que investiga el juzgado de Instrucción 4 de Lleida por supuesta inacción de Mossos en hechos del 1 de octubre, el magistrado ha oficiado a la Guardia Civil para que hoy obtenga del CTTI (Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información) correos electrónicos de un mando de la comisaría de Ponent de Mossos", ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).

El juez de Lleida mantiene en secreto esta investigación, una de las que se han abierto en una veintena de juzgados catalanes sobre la supuesta pasividad de los Mossos a la hora de cumplir con las órdenes del TSJC para impedir la votación del 1-O, que había sido suspendida por el Tribunal Constitucional.

Fuentes del CTTI han confirmado a Efe sobre las 9,30 horas que ningún agente de la Guardia Civil se había presentado todavía en la sede del centro.

La presencia de la Guardia Civil en el CTTI se produce un mes y medio después de que llevara a cabo otra entrada, el día de antes del referéndum del 1-O, para hacerse con el control del servicio de votación telemático para dicho referéndum.

Agentes de la Guardia Civil acudieron el 30 de septiembre al CTTI para comprobar si se habían bloqueado el acceso a 29 aplicaciones informáticas que gestionaban bases de datos y que se pretendían usar en el referéndum del 1-O, como había ordenado el TSJC.

El TSJC había ordenado a la Generalitat que suspendiera los servicios informáticos que había activado dentro de un plan para facilitar el voto telemático en la jornada del referéndum del 1-O, que se iba a materializar con una aplicación llamada 'evot'.

Unos días antes, el 20 de septiembre, la Guardia Civil había detenido a catorce personas, entre ellas varios altos cargos del Govern, y practicó 22 registros en conselleries, instituciones de la Generalitat y naves para recabar indicios relacionados con el referéndum del 1-O.

Entre esos arrestados se encontraba el presidente del Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI), Jordi Puigneró.