La presidenta del Gobierno balear, Francina Armengol, una de las voces que con más ha defendido que el PSOE intentara un Gobierno alternativo, ha trasladado al presidente de la gestora, Javier Fernández, su 'no' a la investidura de Mariano Rajoy y ha insistido en que la militancia "debe tener la palabra".

Así lo ha dado a conocer Armengol a través de su cuenta de Twitter tras participar en la recepción tradicional que los Reyes ofrecen a una amplia representación de la sociedad española y que este año ha congregado a unos 1.300 invitados en el Palacio Real. La jefa del Ejecutivo balear ha lamentado asimismo que Fernández haya abierto el debate sobre la abstención antes en los medios que dentro del partido.

"Hoy, en Madrid, le he explicado a javier_asturias que la militancia debe tener la palabra. Desde Baleares defenderemos el No al PP", ha recalcado la presidenta balear, que en una conversación informal con periodistas en el Palacio Real ha asegurado que va a "luchar hasta el final" por esa posición.

Armengol ha advertido de que Fernández no la va a "convencer" de que es mejor abstenerse que ir a elecciones, porque tiene "claro que la posición del PSOE debe ser no", incluso ha apuntado con contundencia que le "da igual" lo que diga el Comité Federal, cuando se pronuncie.

En su opinión, no ha sido "adecuado" que el presidente de la gestora abra un debate en los medios que no se ha abierto en el partido y sin que los militantes puedan opinar, ya que con eso "el partido pierde democracia".

Armengol es, junto con el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, la mayor defensora en el PSOE del "no es no" acuñado por Pedro Sánchez y de la posibilidad de un gobierno alternativo, así como de la consulta a la militancia que propugnaba Sánchez antes de dimitir.

Su conversación de este miércoles con el presidente asturiano se enmarca dentro de la ronda que éste se ha propuesto hacer, en calidad de presidente de la gestora del PSOE, con todos los secretarios generales de su partido para preparar el Comité Federal que deberá decidir si cambia su voto en contra a la investidura de Rajoy por la abstención, con el fin de evitar unas terceras elecciones.