El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, ha defendido que el exministro José Manuel Soria era el candidato más idóneo de los diez que se presentaron al puesto de director ejecutivo del Banco Mundial, ante una oposición que ha pedido su dimisión por las "mentiras" que han rodeado el proceso.

Durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso, Guindos ha recordado que Soria no está inhabilitado ni tiene abierta ninguna investigación administrativa ni judicial y ha elogiado su labor al frente del Ministerio de Industria por haber acabado con el déficit de la tarifa eléctrica.

Ha revelado que Soria sacó la mejor puntuación de entre los diez candidatos que se presentaron, dentro un proceso solo notificado a los Técnicos Comerciales y Diplomados Comerciales del Estado, que son los únicos que han accedido a los puestos en las Instituciones Financieras Internacionales (IFI) en los últimos 30 años.

La segunda mayor nota fue la obtenida por el exsecretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, que se presentó al mismo puesto y que ha sido finalmente el candidato propuesto tras la renuncia de Soria a petición del Gobierno.

El ministro ha explicado que el procedimiento por el que se designó a Soria no está regido por las normas administrativas españolas, dado que se trata de un nombramiento que en última instancia hace el Banco Mundial.

No obstante, ha negado que se trate de una designación política y ha dicho que dentro de la "discrecionalidad" con la que cuenta el Ministerio de Economía para proponer a un candidato, el proceso para este puesto -y todos los que le corresponden a España en las IFI- está sometido a "transparencia y concurrencia".

Ha defendido también la profesionalidad de la Comisión de Evaluación que puntuó a los candidatos, que está integrada por altos cargos del Ministerio, y ha concluido que este caso no es más que "la historia de un no nombramiento".

Saura a Guindos: "Usted no es digno de ser el ministro de Economía"

Saura a Guindos: "Usted no es digno de ser el ministro de Economía"

Toda la oposición ha criticado la comparecencia de Guindos en esta comisión y no en el pleno del Congreso, y ha pedido la dimisión del ministro ante las "mentiras" con las que el Gobierno en funciones explicó en un primer momento la designación de Soria, que unos meses antes había tenido que dimitir tras aparecer vinculado a sociedades opacas en paraísos fiscales.

El portavoz de Economía del grupo parlamentario del PSOE, Pedro Saura, ha acusado al ministro de no haber asumido "ningún error", lo que no le hace "digno" para continuar en el cargo.

Saura ha dicho que "el compromiso con la regeneración democrática" del presidente en funciones, Mariano Rajoy, es "cero", porque se conoció la propuesta "dos minutos después" de acabar la investidura fallida del candidato del PP.

Por su parte, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, que ha querido intervenir en este debate aunque no es el portavoz de Economía en la Comisión de Economía, ha exigido a Guindos, que pruebe que no mintió sobre el nombramiento Soria y ha dicho que si se demuestra que es así debe "dimitir ipso facto".

Iglesias a Guindos: "Si se prueba que nos mintió tiene que dimitir ipso facto"

Iglesias a Guindos: "Si se prueba que nos mintió tiene que dimitir ipso facto"

Iglesias ha planteado seis preguntas al ministro, una de ellas para que aclare si mintió cuando en junio aseguró que el titular de Industria no iba a ser nombrado para ese puesto.

El dirigente de Podemos ha cuestionado la idoneidad de Soria para un cargo en el Banco Mundial remunerado con más de 226.000 euros anuales y le ha preguntado si de verdad no encontraron a nadie mejor para representar a España en el Banco Mundial.

Desde Ciudadanos, el portavoz de la formación, Toni Roldán, ha sugerido que el cargo del Banco Mundial fue "un traje a medida" para Soria, lo que ha negado De Guindos, que ha explicado que la primera convocatoria para el puesto salió en enero, meses antes de que el ministro se viera obligado a dimitir.

El ministro ha aclarado que Soria se presentó a una segunda convocatoria que se hizo a finales de junio, con el aval de la Abogacía del Estado, después de que la anterior se paralizara por prudencia, a la espera de que se constituyera un nuevo Gobierno.