El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha cerrado su intervención en el debate de investidura de Pedro Sánchez considerando la actuación del líder del PSOE como "un bluf".

Tras recordar que el diccionario de la Real Academia define "bluf" como montaje propagandístico destinado a crear un prestigio que después se revela falso, ha estimado que eso se ajusta a lo que ha hecho Sánchez, a quien ha acusado también de propiciar la "teatralidad" con el intercambio de carpetas en su acuerdo con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera.

Rajoy ha ridiculizado además el acuerdo de legislatura firmado por el candidato socialista, con Ciudadanos, una suerte de pacto de los "Toros de Guisando" al que ya ha anunciado dará un "no" en la votación de esta noche.

Rajoy ha sido el primero en tomar la palabra para responder al discurso de investidura pronunciado ayer por Sánchez, quien expuso como uno de los argumentos para conseguir su objetivo el hecho de que la gran mayoría de los grupos parlamentarios desea que el PP pase a la oposición.

"Ese gran pacto histórico que hasta los niños estudiarán en las escuelas", ha ironizado Rajoy, que cree que ese acuerdo se ha presentado de forma tan teatral y altisonante, "sin el menor sentido del ridículo" que hacía pensar que se trataba de una página histórica "sólo comparable a los Toros de Guisando".

El líder del PP, Rajoy, ha acusado hoy al líder del PSOE, Pedro Sánchez, de presentar una "candidatura ficticia" para formar gobierno, cuando "en realidad no ha movido un dedo para formarlo".

Y a continuado con esta crítica reprochando al líder del PSOE de de montar una estrategia similar a un "vodevil" y con la que sólo busca su supervivencia ante unas próximas elecciones generales.

Para Rajoy, Sánchez ha gastado un mes repartiendo promesas y esperanzas "con las manos vacías", actuando como un "rigodón" que cada poco tiempo cambia de pareja y haciendo "teatro".

"No engañan a nadie, ni al Rey, ni a esta Cámara ni al conjunto de los españoles", le ha espetado durante su intervención en la segunda jornada del debate de investidura de Sánchez a la Presidencia del Gobierno.

Ejercicio de demolición

El presidente del PP ha acusado además al líder del PSOE de pretender hacer "un ejercicio de demolición iconoclasta" que amenaza con desmantelar todas las reformas del anterior Gobierno, que han permitido sacar a España de la crisis.

Durante su discurso en el debate de investidura de Sánchez, Rajoy se ha quejado de que el candidato socialista aspire a llevar a cabo "una contrarreforma de la política económica y social de la última legislatura", que fue la que posibilitó que España pasara de la destrucción de empleo a su creación o del descontrol de las cuentas públicas al control del déficit.

Según Rajoy, se entendería que Sánchez quisiera demoler todo si las políticas del Gobierno del PP hubieran dejado al país peor que antes, "pero ocurre lo contrario".

A su entender, sería "devastador" acabar con todas esas reformas, a las que, ha recordado, se opuso Sánchez en su día y gracias a las cuales se crea empleo y se ha recuperado la confianza de los mercados.

Sánchez: Su "mayor fracaso" fue escabullirse

El candidato a la investidura, Pedro Sánchez, ha dicho hoy que el "mayor fracaso" de Mariano Rajoy fue "renunciar" y "escabullirse" a formar Gobierno y le ha acusado de "faltar al respeto a siete millones de españoles".

En su réplica al presidente del Gobierno en funciones durante el debate de investidura, Sánchez ha señalado que si Rajoy "hubiera tenido coraje y valentía política, debería haber estado aquí hablando y no sentado en su escaño".

"Ese es su mayor fracaso, su renuncia, este debate es la viva prueba de ese fracaso", ha asegurado el líder socialista.

Nada más subir a la tribuna, Sánchez ha afeado a Rajoy el tono de "falta de respeto" de su intervención: "Escuchándole me reafirmo en la necesidad de cambiar el gobierno en el fondo y la forma", le ha espetado.

Sánchez, que ha optado por contestar de forma individual a Rajoy tras la intervención de éste, se ha reafirmado en la oferta que hizo ayer para "desterrar el insulto" de la vida pública y ha acusado al presidente en funciones de hacer un "ejercicio de imposición y soberbia, que es la forma más débil de ejercer el poder".

El candidato socialista ha pedido a Rajoy que no critique a quienes han "puesto en marcha el reloj de la democracia" y han dado "ejemplo de valentía y coraje" y ha calificado de "frívola" su "voluntad de cambio y de acuerdo".

"Nos propone cambiar de gobierno, de presidente y de políticas, pero con la condición de que usted siga siendo el presidente, de que el gobierno sea del PP y de que haga las políticas del PP, y luego me llama usted a mi frívolo", le ha dicho.

Sánchez ha sostenido que Rajoy se "escabulló" del encargo del Rey para formar gobierno con el argumento de que él ya había pactado con el líder de Podemos, Pablo Iglesias; un pacto inexistente con un partido que, paradójicamente, "puede ser esta semana su tabla de salvación".

Sánchez acusa a Rajoy de falta de valentía política

El líder del PSOE ha defendido su pacto con Ciudadanos y ha dejado claro hasta en cuatro ocasiones que "sí sirve", al menos para intentar desatascar la situación de bloqueo en la que está el país.

Este documento es, según Sánchez, una "enmienda a la totalidad" de la políticas que el Gobierno del PP ha desarrollado durante los últimos cuatro años, en especial, en materia económica y laboral.

Ante las críticas de Rajoy por el "vodevil" en el que los socialistas han convertido la negociación para tratar de formar gobierno, Sánchez le ha replicado que el "mayor fracaso" del presidente en funciones fue "renunciar" y "escabullirse" ante el Rey.

"Si hubiera tenido coraje y valentía política, debería haber estado aquí hablando y no sentado en su escaño. Ése es su mayor fracaso, su renuncia, este debate es la viva prueba de ese fracaso. Faltó el respeto a los españoles", ha rematado Sánchez.

El candidato socialista ha pedido a Rajoy que no critique a quienes han "puesto en marcha el reloj de la democracia" con el fin de encontrar una solución al bloqueo generado tras el 20 de diciembre.

Ha recordado a Rajoy que declinó someterse a la investidura tras denunciar que el PSOE había pactado ya un gobierno con Podemos, a quienes ha advertido de que esta semana "pueda convertirse el la tabla de salvación" para que el PP siga en el gobierno.

Ante la renuncia a someterse a la investidura, Sánchez ha subrayado que tenía dos opciones: hacer "un Rajoy" o "dar un paso al frente" e intentar conformar una mayoría alternativa pese a ser "muy difícil y complejo".

Sánchez ha reiterado que "no suman las izquierdas, pero tampoco las derechas", pero ha constatado que "lo que hay es una amplia mayoría" para desbancar a Rajoy del poder después de cuatro años de "absolutismo".

A pesar de rechazar la alianza con el PP, Sánchez ha expresado su respeto a los siete millones de votantes del PP y ha vuelto a ofrecer su mano para consensuar los grandes acuerdos de Estado.

No obstante, ha insistido en que Rajoy se ha convertido en "un tapón para la renovación y la regeneración del PP".

El líder socialista ha señalado que nunca dirá que el PP es un partido corrupto pese a los casos que le afectan, pero ha incidido en que para erradicar esta lacra y que "la política deje de estar en las páginas de sucesos", tiene que haber "una verdadera regeneración democrática del PP y de su liderazgo".

Sánchez ha acusado al PP de hacer "saltar los viejos fantasmas" ante la posibilidad de que el PSOE pase al poder, después de los comentarios de algunos ministros en funciones alertando de los efectos negativos que tendría el cambio de gobierno.

Ante estas amenazas, Sánchez ha respondido: "Muchos de esos problemas se podrían empezar a resolver con la salida del PP del gobierno".