La reunión considerada definitiva de este viernes entre Junts pel Sí y la CUP ha finalizado sin acuerdo, lo que aboca al presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, a convocar el lunes nuevas elecciones en Cataluña.

Tanto los dirigentes de Junts pel Sí como los de la CUP han evitado, no obstante, aparecer públicamente para evitar dar por enterrado un posible pacto sobre la investidura del presidente de la Generalitat, que sólo podría salvarse este sábado "in extremis".

La negociación, estancada desde hace más tres meses por el desencuentro sobre la investidura de Artur Mas, no se ha desencallado tampoco ejuntste viernes, día fijado por el coordinador general de CDC y negociador de JxSí, Josep Rull, como el último para intentar llegar a un acuerdo.

Las entidades soberanistas, con la Asamblea Nacional Catalana (ANC) al frente, han hecho un último esfuerzo de mediación, ya que este sábado es último día para convocar un pleno el domingo y evitar el lunes la convocatoria automática de nuevas elecciones en Cataluña.

Salvo sorpresa de última hora, el presidente de la Generalitat en funciones se verá obligado por ley a firmar el lunes el decreto de convocatoria de elecciones, que Mas avanzó que serían el 6 de marzo.

Los negociadores de la CUP Eulàlia Reguant, Gabriela Serra y Hugo Alvira, y de JxSí Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva y Marta Rovira se han reunido durante apenas una hora en la sede de la ANC, que ha ejercido de mediadora junto con Òmnium y la Asociación Catalana de Municipios.

Ninguno de los negociadores de las dos fuerzas independentistas ha hecho declaraciones y ha sido el presidente de la ANC, Jordi Sánchez, quien ha ofrecido una conferencia de prensa al término del encuentro, en la que ha anunciado que las entidades mediadoras se retiraban de la negociación.

Ha confirmado que Junts pel Sí y la CUP no han logrado un pacto sobre la investidura de Mas, ni tampoco se han dotado de un "escenario concreto" sobre el que construir un acuerdo, dado que han rechazado las dos propuestas de la ANC: una asamblea de electos y una consulta ciudadana como posibles mecanismos para refrendar el nombre del presidente catalán.

En todo caso, Sánchez ha constatado que "el clima de diálogo existe" entre Junts pel Sí y CUP por lo que aún queda "un hilo de esperanza".

La CUP, que antes de la reunión ha reprochado a JxSí falta de voluntad política para llegar a un acuerdo, han indicado tras el encuentro que seguirán trabajando, aunque mantienen que debe haber un candidato alternativo a Mas.

Sin embargo, el líder de CDC no renuncia a abandonar el cargo y anoche en una entrevista televisiva, en un tono desafiante a la CUP y a otros partidos que se ponen en su contra, avisó de que su compromiso de retirarse en el plazo de 18 meses caerá si le "vetan".

Asimismo, Mas avanzó que "lo normal" sería que fuera candidato en las más que probables elecciones del 6 de marzo.

Desde ERC, el número dos en el Congreso, Joan Tardà, ha advertido este viernes en una entrevista en 8tv de que "el precio del desacuerdo será enorme" y ha sugerido de nuevo que Mas dé "un paso a un lado", quedándose en el Govern, para que "una persona de su partido político" sea presidente, en alusión a Neus Munté.

Junqueras pone de ejemplo al Papa

Por su parte, el líder de ERC, Oriol Junqueras, ha puesto como ejemplo al Papa a la hora de reclamar "generosidad" y "diálogo" para lograr un acuerdo entre JxSí y la CUP que facilite la investidura del presidente de la Generalitat, cuando está a punto de expirar el plazo de la legislatura.

Desde CDC, voces como el coordinador general de CDC, Josep Rull, y la portavoz, Marta Pascal, han avisado de que el acuerdo es poco probable de que se produzca y han reiterado que no se puede "excluir" a Artur Mas de la presidencia.

Para este sábado, diversas entidades y ciudadanos independentistas han convocado una concentración en la plaza Sant Jaume de Barcelona para exigir un acuerdo antes de que termine el plazo para investir al presidente de la Generalitat y así evitar unos nuevos comicios.