La Audiencia Nacional ha ordenado juzgar al líder del grupo de música rap Def con Dos, César Strawberry, al considerar que siete comentarios que escribió en Twitter en los que decía "añorar a los GRAPO" o defendía el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara podrían constituir un delito de enaltecimiento del terrorismo.

La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal ha dictado un auto en el que atiende parcialmente un recurso de apelación presentado por la Fiscalía y revoca el auto de archivo de la causa que el juez José de la Mata dictó el pasado 9 de octubre al entender que los comentarios no eran delictivos.

El tribunal, que rechaza la petición de la Fiscalía de juzgar también a 'César Strawberry' por un delito de injurias al Rey, considera que las frases del rapero son "desafortunadas, inoportunas e inapropiadas" y que podrían constituir "un posible ensalzamiento del terrorismo y una supuesta humillación a víctimas concretas".

En concreto, los jueces Ángela Murillo, Teresa Palacios y el ponente de la resolución, Juan Francisco Martel, consideran que el posible enaltecimiento del terrorismo se habría producido en tres tuits en los que el rapero aseguraba: 'El fascismo sin complejos de Esperanza Aguirre, política del Partido Popular, me hace añorar hasta a los GRAPO'; y 'cuántos deberían seguir el vuelo de Carrero Blanco'. En respuesta a una pregunta sobre qué le regalaría al Rey decía que 'un roscón bomba'.

La humillación a las víctimas del terrorismo se aprecia, según el tribunal, en otros tres comentarios: 'A Ortega Lara habría que secuestrarle ahora'; 'Franco, Serrano Suñer, Arias Navarro, Fraga, Blas Piñar... si no le das lo de Carrero Blanco, la longevidad se pone siempre a su lado'; y 'Street Fighter edición post-ETA: Ortega Lara versus Eduardo Madina'. A estos se añade un retuit en el que el rapero hizo suyo el comentario '¿se puede llevar una camiseta con un estampado de Miguel Ángel Blanco? Lo pregunto desde el respeto y el verano'.

A juicio de los magistrados, estos mensajes "no dejan lugar a dudas" en cuanto a su significado y no pueden ampararse, como defendió el juez De la Mata, en "el contexto de defensa de la cultura y de las propias opiniones", puesto que no resulta "descartable" en esta fase procesal que puedan ser constitutivas de delito.

Tras señalar que los posicionamientos en contra del terrorismo que el rapero, cuyo nombre real es César Augusto Montaña Lehmann, realizó en los años 1997 y 2001 no le eximen de la posible responsabilidad penal de estos comentarios, el auto destaca que el auto de archivo de De la Mata resulta "carente de solidez" y no se puede cerrar "artificialmente" la vía de apelación al recurrente.

En relación con el delito de injurias a la Corona, la Sección Cuarta confirma la decisión del juez instructor de no apreciar indicios de delito en un tuit en el que decía 'yo soy de los que desean ver a Felipe de rey cuanto antes... para cargarme en su puta madre con más argumentos'.

A pesar de considerar que el comentario resulta "ineducado e inadecuado" y que puede "desacreditar más a la persona que emite el tuit que a las personas a las que van dirigidos los improperios", los magistrados señalan que, admitiendo el error ortográfico esgrimido por la defensa según el cual lo que quería decir su cliente era "cagarme en su puta madre", no se puede apreciar en el mismo "un carácter injurioso".

Comentarios "aislados"

De la Mata archivó la causa en un auto en el que señalaba que, aunque los mensajes que escribió el rapero sobre ETA y sus víctimas pudieron ser "desafortunados", tuvieron un carácter aislado y no fueron acompañados de una actitud "persistente" dirigida a alabar las actividades de la banda terrorista.

También decía que el músico ha mostrado en público su compromiso social con distintas causas, "expresándose, eso sí, desde una estética provocadora, irónica y sarcástica, buscando generar en los receptores perturbación, disconformidad o escándalo".

'César Strawberry' fue detenido por la Guardia Civil el pasado 19 de mayo junto a otras 18 personas en el marco de la tercera fase de la denominada 'operación Araña'. El rapero negó haber subido a su cuenta los mensajes investigados y la Guardia Civil determinó que estos no se escribieron desde los dispositivos que se le incautaron.