Las pruebas periciales ocupan sesión de hoy -la número 15- del crimen de Asunta Basterra. Los primeros en declarar ante el juez fueron peritos del Departamento de Química del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil, quienes desvelaron el hallazgo de restos de lorazepam en la parte inferior del vestido que llevaba puesto Rosario Porto el día de la desaparición de Asunta. Además, tenía restos de nicotina, al igual que una mascarilla de papel y un manojo de papeles hallado en casa de Teo.

Testificaron que la cuerdas naranjas que aparecieron en la casa de Teo y junto al cuerpo de Asunta son iguales, sin embargo, no pueden sostener que formasen parte del mismo rollo. Aseguran que ambos elementos no se distinguen desde punto de vista de su composición, pero añaden que "eso no quiere decir que tengan origen común".

En el caso de los cuchillos localizados en dos baños de la casa de Porto en Teo, tampoco aportaron una conclusión clara. Las pruebas no determinaron fibras de las cuerdas naranjas que puedan determinar que se usaron para cortarlas. No obstante, apuntan que los cortes podría haber sido realizados con unos cuchillos como los analizados.

El portátil de Basterra

Los peritos que analizaron el ordenador portátil de Alfonso Basterra encontraron un total de cinco huellas identificables en él, ninguna de ellas de su propietario y una, desconocida, en el disco duro del dispositivo.

Según han declarado este jueves los peritos en sede judicial, el ordenador presentaba muchas huellas que no podían ser identificadas con claridad, dado que se encontraban borrosas o estaban superpuestas. Por ello, aunque no se encontró ninguna huella de Basterra en él, no descartan que la hubiese y no pudiesen verificarla.

En total, el servicio de identificación de la Guardia Civil encontró en el portátil del acusado cinco huellas útiles, cuatro desconocidas y una de Asunta, situada en la parte inferior de la disquetera.

Los peritos han indicado además que una de las huellas, de origen desconocido, se localizó sobre el disco duro del ordenador, lo que implica abrir la carcasa del portátil para acceder a este elemento que guarda toda la información del dispositivo.