El juez José de la Mata ha acordado el embargo de los bienes y derechos económicos que puedan corresponder de la herencia de José María Ruiz-Mateos -fallecido el 7 de septiembre- a sus hijos Zoilo, Pablo, Álvaro, Francisco Javier, José María y Alfonso, imputados en la causa de Nueva Rumasa.

Así lo expone en un auto del Juzgado central de Instrucción número 5 De la Mata, quien después de conocer la existencia de un testamento cerrado del empresario jerezano pide al notario que "tan pronto como se abra y protocolice el testamento deberá entregar una copia a la secretaria judicial del juzgado".

El juez solicita que, "una vez obtenida dicha copia el juez y secretaria judicial, se procederá a una lectura reservada, dejando constancia en los autos únicamente de los bienes que constituyen el caudal hereditario".

Con esta medida cautelar, el magistrado pretende proteger los derechos de los perjudicados en esta investigación, que son 4.110 inversores que, hasta donde se conoce, pudieron aportar en inversiones 337 millones de euros de los que faltan por reintegrar 289 millones.

Por este motivo, se pretende investigar "cualquier indicio de su rastro y destino", porque, según apunta, esos fondos sólo alimentaban un fraudulento mecanismo piramidal aflorado tras producirse el colapso económico del grupo empresarial.

En el auto, el magistrado explica, además, que los seis hijos de Ruiz Mateos imputados no han depositado la fianza de 30 millones que se les fijó hace 4 años y "hay indicios suficientes de que existen bienes inmuebles que están siendo disfrutados por los querellados, utilizando nombres de sociedades vinculadas al denominado "Grupo Nueva Rumasa".

"Un mecanismo para ocultar la verdadera o real titularidad, y así prevenir la efectividad de medidas cautelares como la que aquí se acuerda", añade el auto.

El juez explica en su escrito que la lectura del testamento debe ser reservada a fin de que únicamente se incorporen a las actuaciones los elementos pertinentes, "excluyendo otras manifestaciones o disposiciones contenidas en el testamento que no guarden relación con los hechos investigados".

Los citados seis hijos de Ruiz-Mateos están imputados por delitos de estafa agravada, insolvencia punible, administración desleal y delito contra el mercado y los consumidores.

La semana pasada el notario Carlos Pérez Baudín informó de la existencia de un testamento cerrado que le dejó el empresario José María Ruiz-Mateos, aunque dijo que desconocía "si éste es su último testamento o no".

"Es algo que solo le corresponde saber a sus legítimos herederos", declaró Pérez Buadín.