El presidente de la Generalitat de Cataluña y candidato de 'Junts pel Sí', Artur Mas, ha augurado este lunes que un eventual Estado catalán sería viable y no iría a la cola del acceso a la UE, pero ha reclamado una negociación de la independencia con España sin "lesiones" mutuas, para que ambas partes salgan ganando.

Mas ha ofrecido hoy una conferencia de prensa titulada "La viabilidad económica del nuevo Estado" junto con los economistas Germà Bel y Oriol Amat, números uno de 'Junts per Sí' por Tarragona y séptimo por Barcelona, respectivamente.

El líder de CDC ha rechazado las críticas del presidente de la CEOE, Juan Rosell, y el de la Cámara de Comercio de España y Freixenet, José Luis Bonet, que han advertido de que una Cataluña independiente tendría una menor actividad económica, menos empleo y "peores condiciones de vida".

Mas ha admitido que hay voces "influyentes" contrarias al proceso independentista, pero ha considerado que son minoritarias y, tras recordar el reciente apoyo de diversas entidades empresariales al derecho a decidir, ha avisado: "El 27S, el voto del autónomo más pequeño valdrá lo mismo que el voto del directivo más poderoso o del empresario más grande".

Además, el líder de CDC ha remarcado que los que auguran una Cataluña soberana fuera de la UE utilizan este recurso como "arma para desmontar adhesiones a favor del sí" de cara al 27S, en una estrategia de "amenaza y miedo que no se aguanta".

"No se puede decir que Cataluña iría a la cola de la UE, porque ya está en la UE y te tienen que sacar para ponerte en la cola. ¿Cómo narices se saca a alguien, en contra de su voluntad, fuera de la UE?", se ha preguntado Mas.

En esta línea, Amat y Bel han defendido que Cataluña no quedaría "ni un milésima de segundo fuera de la UE" en lo que afecta al día a día de las empresas y los ciudadanos, porque creen que se hallaría un mecanismo transitorio para que no hubiera ningún impacto mientras terminan las "formalidades" a una adhesión completa a la UE.

Mas, Bel y Amat han coincidido en que Cataluña no debe sufrir desde el punto de vista económico porque, según sus cálculos, sería un Estado con "superávit", "más justo y más próspero".

El president ha defendido que, en el caso de una secesión, Cataluña sería viable, al igual que lo sería España, por lo que ha apelado a una negociación sin "lesiones" mutuas si hay una mayoría independentista -al menos de escaños, ha incidido- el 27S.

En este sentido, ha avisado de que "no tendría ningún sentido" que en un proceso de separación comportará "lesiones económicas" de España a Cataluña, "porque afectaría a unos y otros, sería en los dos sentidos".

Mas ha dicho que la negociación debería ser de "win win" (ganancia por partida doble), "con un buen ánimo de entenderse y no perjudicarse", y ha avanzado que Cataluña estaría dispuesta a asumir parte de la deuda de España y a mantener la solidaridad: "No daremos la espalda a los territorios españoles", ha añadido.

Superávit

El president ha admitido que el camino a la independencia pude tener "incertidumbres" pero ha señalado que seguir como hasta ahora, en el contexto autonómico, es continuar con la "certidumbre" de la "macrodependencia económica respecto al Estado" de la que, según ha dicho, ha salido perjudicada la población catalana.

Según 'Junts pel Sí', una eventual Cataluña independiente tendría un superávit con el que podría dedicar 2.200 euros al año por persona, desaparecería el déficit actual de la Generalitat de 5.000 millones de euros y se crearían entre 50.000 y 70.000 empleos nuevos por las "estructuras de Estado".

En lo que se refiere a las pensiones, una hipotética Cataluña independiente tendría un saldo positivo de 24.126 millones de euros entre los ingresos de los trabajadores y el gasto en prestaciones.