Las detenciones llevadas a cabo en la madrugada del lunes por la Guardia Civil y la Policía en el País Vasco y Navarra en el marco de una operación contra Segi han provocado numerosas reacciones entre la clase política.

Por parte del gobierno, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró que la operación ha cumplido los tres objetivos marcados, entre ellos, el de impedir que ETA tenga una cantera. EL principal partido de la oposición, el PP, celebró la "ejemplar" lucha antiterrorista que están llevando a cabo los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y se mostró "orgulloso".

Rubalcaba, que compareció en el Parlamento para explicar los objetivos de la Presidencia Española de la UE en materia de interior, agradeció las felicitaciones que le habían trasladado todos los grupos de la Cámara por la detención de 34 miembros de la organización ilegalizada Segi.

Explicó que la operación ha sido llevada a cabo de forma "simultánea" por la Policía y la Guardia Civil, coordinada por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande Marlaska. Más de 90 registros fueron realizados.

No obstante, precisó que la operación aún no está cerrada, aunque ya ha supuesto que se descabezara "la cúpula dirigente de Segi, que es la organización juvenil de ETA". Según el ministro, las acciones desarrolladas "cumplen tres objetivos" que se ha marcado el Ministro del Interior: impedir que las organizaciones de ETA que han sido ilegalizadas se rehagan; impedir que ETA tenga una cantera y luchar contra la violencia callejera que organizaba Segi. "No queremos que haya ningún tipo de impunidad en el País Vasco", exclamó Rubalcaba.

Calificó la operación de "buena", dijo estar "muy satisfecho" con el trabajo realizado y precisó que trasladaría las felicitaciones recibidas en el Parlamento a las Fuerzas u Cuerpos de Seguridad del Estado.