Bonache es el único negocio abierto este sábado por la mañana en la Plaza de las Flores. Los bares están de huelga. No están de acuerdo con el mapa de ruidos elaborado por el Ayuntamiento y quieren que se les oiga. 'El persianazo. Cerramos por Murcia y los murcianos', se lee en los carteles que cuelgan de los cristales de los establecimientos chapados.

Al mediodía, en la Plaza Santa Catalina, se concentran damnificados por la ordenanza municipal. No hay un lugar para tomarse una caña. Los que protestan reparten botellines de agua. Hay una pancarta grande con letras negras enganchada en dos arboles: '¡Trabajemos juntos por la Murcia de todos!'

Se concentran dueños de los bares y sus empleados. La estampa, nunca vista en la zona. El Aromas, cerrado. El Secreto, cerrado. El Café Fénix, cerrado. Algunas personas, que no se habían enterado de la movilización, pasean por la plaza en busca de un sitio en el que tomar una marinera. Sin éxito.