El municipio de Murcia contará en breve con dos plantas fotovoltaicas con las que se pretende dar un impulso al uso de energías renovables entre la población creando conciencia sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y frenar el avance del cambio climático. En concreto, se trata de dos proyectos privados cuyas empresas ya han iniciado los trámites pertinentes con el Ayuntamiento de Murcia, según ha confirmado a LA OPINIÓN el concejal de Urbanismo, Medio Ambiente, Agua y Huerta, Antonio Navarro Corchón, quien subraya que «estamos potenciando esta energía con los dos futuros parques fotovoltaicos que se quieren poner en marcha en el municipio».

Estas plantas de energía limpia se instalarán en Corvera y en Cañada Hermosa, tal y como señalan fuentes municipales. La primera de ellas está promovida por la empresa Generación Fotovoltaica Lo Borrego S.L. cerca del futuro aeropuerto internacional de la Región de Murcia y contará con una superficie de 28,8 hectáreas ocupadas. El proyecto contempla una inversión superior a los 41 millones de euros y una potencia de 49,10 megavatios con 140.430 placas instaladas.

El segundo proyecto, en Cañada Hermosa, está impulsado por MEX-SOL 1492 S.L. y prevé una inversión de 36,2 millones de euros. La finca en la que se quiere instalar este parque solar fotovoltaico tiene una superficie de 150 hectáreas y tendrá una potencia de 49,5 megavatios. Navarro Corchón ha explicado que las dos compañías han solicitado ya las licencias necesarias para iniciar esta actividad en Murcia, proceso en el que se encuentran ahora mismo inmersos los servicios municipales implicados analizando toda la información aportada por las empresas.

Proyecto en 2006

Éste no es el primer proyecto que se inicia para que Murcia cuente con plantas solares fotovoltaicas, ya que en el año 2006, previo a la crisis económica, se presentó una iniciativa liderada por Ecostream, que pretendía crear en la pedanía murciana de Lobosillo la mayor planta de energía fotovoltaica del mundo, de 14 megavatios, una planta que pretendía superar a la de Espenhain (Alemania), de 5 megavatios, y que en aquel momento era la de mayor potencia del mundo. Para aquel proyecto, la empresa Globasol y el Grupo Globalia contaban con 267.000 metros cuadrados de terreno o 'campo solar' en Lobosillo, donde estaba previsto instalar unos seis conjuntos de entre 80 y 140 huertos solares de 2.000 metros cuadrados cada uno.