Un interno del centro penitenciario de Campos del Río fue encontrado muerto el pasado viernes en su celda, tal y como publicó LA OPINIÓN ayer. A la espera del resultado de la autopsia, otros presos manifestaron que había ingerido gran cantidad de pastillas, tanto las que él tenía recetadas como otras cosas que consiguió en el patio. Como cada vez que muere un preso entre rejas, Instituciones Penitenciarias ha abierto una investigación.

La asociación Acaip denunciaba recientemente el trapicheo de fármacos en la prisión. Esto se debe, aseguran, a que a los reos les dan todas las pastillas de golpe, consecuencia de la carencia de sanitarios en el lugar. El presidente nacional de Acaip, José Luis Pascual, anunció que su colectivo tomará acciones legales a este respecto.