Marco Antonio Fernández (Murcia, 1978) ha cubierto la vacante que dejó Roque Ortiz en el equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Murcia. El alcalde José Ballesta le ha encargado la Concejalía de Pedanías, algo que conoce muy bien, pues él mismo ha sido durante ocho años pedáneo de Monteagudo. Informático de profesión, asegura que en este poco más de un año que queda hasta las elecciones trabajará con ahínco para que los vecinos de las 52 pedanías murcianas tengan la misma calidad de vida que los que residen en la ciudad.

¿Qué le ha encargado el alcalde José Ballesta? ¿Qué quiere de usted?

El alcalde me dio un mensaje muy claro: quiere darle un mayor protagonismo a las juntas municipales, así como de las juntas de barrio, de manera que se visualice más la importancia que tienen en la Administración local.

Cada vez son más los murcianos que se van a vivir a las pedanías, que concentran ya más del 60% de la población del municipio. ¿En qué estado cree que se encuentran?

El hecho de que cada vez más gente de la ciudad se vaya a las pedanías, y la población de éstas crezca a un ritmo superior, es porque, además de que el precio de la vivienda pueda ser más asequible en una pedanía que en el centro de Murcia, que estas cuentan con unos buenos servicios, que ofrecen una muy buena calidad de vida. Nadie se va a vivir a un sitio donde se vive mal. Residir en una pedanía permite estar en un núcleo con gran cantidad de servicios y, además, muy cerca de la gran ciudad, gracias también a la mejora de la vertebración con infraestructuras como las Costeras y las avenidas Reino de Murcia y Miguel Induráin. La situación de las pedanías, en general, es muy buena, lo que no significa que no tengan necesidades y que no haya cosas para mejorar. Le puedo decir que me he encontrado una sorpresa agradable al llegar a la Concejalía, y es que el Ayuntamiento de Murcia tiene preparado un aluvión de inversiones en las pedanías, que se comenzaron el pasado año, y que contemplan más de quince millones de euros. Además, hay que tener en cuenta que el Gobierno regional ha recuperado el plan de obras para estas entidades de población del municipio de Murcia. Tenemos un aluvión de dinero para invertir en las pedanías, estamos ante unos niveles de inversión sin precedentes.

¿Cómo se va a decidir la inversión de ese dinero?

Se está consensuando con todos los grupos políticos, principalmente con los que tienen responsabilidades de gobierno en las juntas municipales, que son Partido Popular, PSOE y Ciudadanos. El Pleno aprobó crear una comisión integrada por todos los partidos que decidirá las inversiones en base a una serie de criterios como la población, la distancia con el casco urbano, la dispersión geográfica, etc. Las prioridades las marcarán las propias juntas municipales, que son las conocedoras de las necesidades de cada sitio. Esto es en lo que corresponde al Ayuntamiento de Murcia. Las juntas municipales, por su parte, tienen también un dinero transferido para financiar los proyectos que ellas decidan.

Como usted dice, muchas juntas municipales son gobernadas por otros partidos diferentes al suyo. ¿Cómo va a ser la relación con estos presidentes de PSOE y de Ciudadanos?

Por ahora, la relación es estupenda, con total normalidad, con cortesía y amabilidad. El jueves visité San Ginés, estuve con el presidente, que es del PSOE, y también con un vocal de Ciudadanos. Todos somos Ayuntamiento y estamos en el mismo barco para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Estuve paseando con los miembros de la junta municipal por los diferentes puntos que tenían necesidades de mejora. E hice exactamente lo mismo en Sangonera la Verde, donde el presidente de la junta municipal es del PP. Tanto el equipo de Gobierno como los que están al frente de las juntas municipales queremos lo mejor para las pedanías, aunque en ocasiones tengamos puntos de vista distintos.

¿Tiene intención de visitar todas las pedanías?

Por supuesto. Iré a todas, bien asistiendo a los plenos o visitando las obras. Otra de las cosas que me encargó el alcalde es que esté a pie de calle.

Ha entrado en el equipo de Gobierno por la salida de Roque Ortiz. ¿Cómo ha encontrado al grupo municipal?

He entrado un mes después y la cuestión ya está asumida. Entiendo que con pena, pues Roque era una persona muy querida y con mucho peso político. Aquí hay una actividad frenética. Hay muchos proyectos y de importancia y esto no se puede parar. Veo a los compañeros trabajando desde primera hora de la mañana, de lunes a domingo.

¿Cree que Ballesta debe optar a un nuevo mandato?

Sin lugar a dudas. Solo en dos años y medio ha puesto en marcha una cantidad de proyectos, complejos y costosos, que tiene muy avanzados. Es una persona brillante y un gestor extraordinario. Debe continuar para, al menos, culminar estos proyectos.