Un emblema del final de la noche murciana para unos y el artífice de muchos desayunos en familia para otros. El churrero del Plano de San Francisco, junto al Mercado de Verónicas en Murcia, Pedro Martínez Cánovas, falleció ayer a los 74 años.

Pedro Martínez fue la tercera generación de su familia en llevar este negocio. Su churrería, 'El Plano', en la conocida calle de Murcia data de 1912 y pasó toda su vida, desde niño, sirviendo churros a los murcianos.

El conocido churrero sacrificó sus fines de semana porque, como aseguró en una entrevista realizada hace varios años, "es más importante servir el chocolate con churros".

El negocio familiar ha ido cambiando en las últimas décadas y Pedro Martínez pasó de atender a los clientes que madrugaban para desayunar en familia sus churros con chocolate, a servirlos a los jóvenes antes de acostarse.

La misa de corpore insepulto se ha celebrado este miércoles en la iglesia parroquial de San Juan Bautista de Beniaján.