A la cárcel. Así salía, en un furgón policial, de la Ciudad de la Justicia este viernes el hombre detenido por presuntamente intentar atracar el martes pasado la confitería Encarnita, en la pedanía murciana de Algezares.

Y es que no sólo se le investiga por esto: el mismo hombre está acusado de robo con intimidación, además de en la confitería, en un supermercado y una cafetería. Estos dos últimos asaltos se habrían producido el pasado viernes, 19 de enero.

Tomó la decisión de mandar a prisión provisional al sospechoso la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Murcia, en funciones de guardia.

El atraco de Algezares ocurría a primera hora de la mañana, cuando Mª de la Encarnación desayunaba con su madre en la trastienda de su confitería, de nombre Encarnita, en el número 3 de la calle Saavedra Fajardo, en la localidad de Algezares. Alguien entró por la puerta. Al escuchar una voz, y pensar que se trataba de un cliente, Mª de la Encarnación salió. Pero el hombre con el que se topó no iba precisamente a comprar magdalenas. Llevaba la cara tapada con un pasamontañas oscuro, unas gafas de sol le tapaban los ojos y portaba en la mano un arma de fuego. Instó a Mª de la Encarnación a que le diese el dinero. Pero ella no se achantó.

Según declaró la mujer después a la Policía, era obvio a primera vista que la pistola era falsa. Además, vio cómo al atracador le temblaban muchísimo las manos. De ahí que ella no estuviera dispuesta a darle dinero alguno. En vez de eso, optó por tirarle una botella a la cabeza, contó a los agentes. Y después pensaba lanzarle un objeto sólido (de papelería, donde está el celo que usa para envolver los dulces), pero el atracador salió por piernas antes.