Maquinaria pesada que está realizando labores de desbroce está dañando la flora y la fauna protegida en el lecho del río Segura en la zona de la Contraparada. Así lo ha denunciado la Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse), cuyos técnicos aseguran que hace un par de semanas se pusieron en contacto con la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) por la presencia de una máquina giratoria de gran tonelaje y con cadenas de más de dos metros de ancho que estaba trabajando desbrozando la vegetación del río desde el interior del cauce, «una práctica que ya se había abandonado por su alto impacto y que contrasta con las iniciativas que se vienen desarrollando en la zona para la conservación y recuperación de las riberas», indicó ayer a esta Redacción Jorge Sánchez, miembro de Anse.
Desde la asociación aseguran que esta actuación está causando un gran impacto con la erosión y compactación de la orilla, a la vez que se están aplastando las comunidades biológicas.
Los recorridos realizados por los técnicos de Anse han puesto de manifiesto los intensos impactos que están ocasionando los trabajos al ecosistema, «donde a la pérdida temporal de cubierta vegetal por el desbroce, se suman la erosión y compactación de orillas, el aplastamiento de fauna vertebrada, como el galápago leproso, daños a flora protegida y plantaciones de bosque de ribera».
Quizás el impacto más preocupante, según Anse, sea el lecho «lo que supone la completa destrucción de las comunidades acuáticas de invertebrados y peces (entre ellos la amenazada anguila). Otros impactos potenciales serían el riesgo de contaminación de las aguas en caso de accidente o negligencia o la pérdida de zonas refugio para la nutria».
Desde la Asociación de Naturalistas del Sureste lamentan la ejecución de trabajos de desbroce de esta forma tan impactante. A juicio de la organización, el desbroce de cañas y carrizos puede ser necesario en determinados casos, pero estos trabajos deben realizarse siempre desde tierra con maquinaria del menor tonelaje posible (incluidos desbrozadoras de mano) y nunca haciendo circular la maquinaria pesada por el lecho del río. Por ello, solicita la inmediata retirada de la maquinaria del lecho del río y que los trabajos de control del carrizo y de la caña se realicen sin comprometer la biodiversidad del río.
