El nuevo contrato para el servicio de alumbrado del Ayuntamiento de Murcia ha generado tal malestar entre los empleados, que no serán subrogados por la nueva empresa, que éstos han decidido convocar una huelga que comenzará el próximo jueves 28 de diciembre.

Los 55 trabajadores afectados por el cambio del contrato han intentado negociar con el equipo de Gobierno, apoyados por los grupos de la oposición, sin que hayan logrado una solución a su problema, lo que ha hecho que hayan optado por realizar paros a partir de la próxima semana.

El portavoz de USO en el comité de empresa, José Sáez, ha comunicado que ha huelga de empleados del servicio de alumbrado arrancará el día 28 entre las 12.00 y las 15.00 horas del mediodía. Paros que se volverán a producir el 29 de diciembre de 8.00 a 23.00 horas; el 4 de enero de 12.00 a 15.00; 5 de enero de 8.00 a 23.00 horas; 11 de enero de 12.00 a 15.00 y 12 de enero, también de 12.00 a 15.00, según el documento que la Unión Sindical Obrera ha entregado en la Oficina de Mediación y Arbitraje Laboral de la Región de Murcia y al que ha tenido acceso LA OPINIÓN.

El concejal de Cambiemos Sergio Ramos considera que "esta situación es una consecuencia de la actitud del equipo de Gobierno del Ayuntamiento, que no escucha a los trabajadores" y cree que los paros anunciados por los empleados del alumbrado puede afectar al servicio en unos días tan señalados y con tanto uso de este servicio como es la Navidad.

Reunión

La pasada semana se celebró una reunión en la que los servicios jurídicos y técnicos municipales explicaron que el nuevo pliego de contratación de la gestión del alumbrado público del Ayuntamiento de Murcia no puede incluir una cláusula para subrogar los 55 trabajadores de la concesionaria actual, ya que la legislación y el convenio del sector no establecen esa condición.

El concejal de Hacienda y Contratación, Eduardo Martínez-Oliva, convocó el encuentro ante la controversia al conocerse que ese pliego de condiciones no obligará a la empresa adjudicataria a asumir a los trabajadores de la actual.

Según explicó el edil, no se trata de un "matiz político", sino de un asunto "legal", puesto que el convenio colectivo del metal que rige este servicio no contempla que en la contratación pública sea necesaria la subrogación de los empleados de las anteriores concesionarias.

También recordó que la actual, Electromur, finalizará su contrato el próximo mes tras seis años de gestión y matizado que el hecho de que no se obligue a subrogar de los trabajadores no significa necesariamente su despido, pues una nueva concesionaria podría contratarlos. Además, puede que Electromur resulte de nuevo adjudicataria, con lo que podría mantener a sus 55 empleados, algunos de ellos con más de dos décadas de experiencia.

Numerosas sentencias del Tribunal Central de Recursos Contractuales y del Supremo recogen que si la cláusula de subrogación no está prevista en los convenios colectivos, no se puede incluir en los pliegos de condiciones, según los técnicos y expertos jurídicos municipales.

Desde el equipo de Gobierno se han comprometido a estudiar una solución alternativa, si bien han advertido de que será difícil llegar a ella, según Martínez-Oliva.