La huelga de taxistas en toda España ha dejado las calles de las ciudades sin taxis y Murcia no ha sido una excepción. Los conductores estaban convocados a una manifestación que salió desde Atocha, en Madrid, a las 11 de la mañana con destino el Congreso. Hasta allí se desplazaron en torno a 80 taxistas murcianos para protestar contra la 'uberización' del sector, según explicó el presidente de Radiotaxi en la Región, Sergio Navarro.

En palabras de Navarro, el transporte público urbano está experimentando un incremento de vehículos de alquiler sin conductor (VTC), de firmas como Uber y Cabify, y el sector está sufriendo la competencia desleal que, según explica, practican estas compañías.

Hasta pasasadas las tres de la tarde apenas una veintena de taxis ofrecieron servicios mínimos a los ciudadanos. Además, el resto de conductores que no formaron parte de este dispositivo y que, por lo tanto, no levantaron la bandera en toda la mañana, circularon por la capital sin pasajeros a bordo.

Según informó Sergio Navarro, los taxistas que formaron parte de estos servicios mínimos aprovecharon la jornada para informar a los usuarios murcianos y explicarles en qué basan sus protestas. A partir de las tres, los servicios en Murcia volvieron a la normalidad.

Momentos de tensión en Madrid

Momentos de tensión en MadridUn grupo de taxistas de los centenares que se movilizaron ayer en Madrid protagonizó momentos de tensión en las inmediaciones del Congreso al zaranderar las vallas en la Carrera de San Jerónimo que separan la Cámara Baja de la zona donde se concentraron cientos de manifestantes.

Los antidisturbios que vigilaban la barrera tuvieron que avanzar varios metros para proteger el cordón de seguridad, sin que se produjeran cargas o incidentes.

Pese a que la Delegación del Gobierno estableció la autorización de manifestación hasta las tres de la tarde, decenas de taxistas permanecieron concentrados varias horas más en la plaza de Cánovas del Castillo «a la espera de una solución del Gobierno» ante lo que este sector califica de «competencia desleal» de las plataformas Uber y Cabify.