La buena marcha de la economía regional en los primeros meses del año ha permitido mejorar las previsiones para 2017, según recoge el Boletín de coyuntura económica que elabora la Cámara de Comercio de Murcia. El Servicio de Estudios de la corporación cameral apunta que los indicadores de la construcción en la Región permiten esperar incluso «una moderada recuperación del sector, sobre todo por la obra residencial», dado que la obra pública sigue bajo mínimos.
La cifra de las viviendas terminadas consigue un aumento del 41,8%, mientras que los visados de obra nueva se incrementan un 10,7% hasta abril. Por el contrario, «la licitación oficial refleja una actividad mínima, ya que según el Ministerio de Fomento desciende hasta abril un 22,8%, condicionada por el menor volumen licitado por la Administración central, aunque la Comunidad Autónoma y las corporaciones locales mejoran su nivel de contratación».
Por su parte, la cifra de negocio del sector servicios del INE avanza un 4,2% de aumento hasta abril, «aunque este porcentaje no llega a superar los registros de hace un año y los del contexto nacional. Los indicadores turísticos denotan la fortaleza del sector, con avances en el número de viajeros y pernoctaciones en establecimientos turísticos del 6,5% y 2,2%, respectivamente. Estos registros están marcados por la favorable evolución de los turistas nacionales, mientras que los extranjeros ofrecen una leve disminución, también en los establecimientos hoteleros».
Durante el primer trimestre se estima un crecimiento del 3,1% interanual, una décima superior a la media nacional, lo que permitiría una revisión al alza del crecimiento estimado para la economía regional en 2017 hasta un máximo del 3,4%.
También el BBVA ha elevado la previsión de crecimiento para Murcia en 2017 al 3,4%.
La producción industrial crece un 6% hasta mayo respecto al año anterior, principalmente por la fabricación de productos energéticos y, en menor medida, los bienes intermedios.
La agricultura, «condicionada por la escasez de agua, mantiene resultados dispares en cuanto a los avances de producción, con aumentos en algunas variedades como cebada, patata, melocotón y almendro; mientras que retroceden otras como albaricoque, ciruelo o tomate. Asimismo, se produce un empeoramiento de las cotizaciones medias, en general inferiores a las del año anterior en algunas de las variedades de mayor producción regional, como lechuga, tomate, limón o melocotón».
El Servicio de Estudios cameral explica que «en el crecimiento económico regional hay que destacar la contribución de las mejoras competitivas acometidas por las empresas desde el inicio de la crisis, así como la continuidad de las favorables condiciones financieras que han permitido crear empleo a buen ritmo». Destaca además los efectos de «la contención del precio del petróleo, a lo que se suma una política fiscal expansiva y una menor incertidumbre política».
No obstante, el Boletín de coyuntura recuerda que «siguen estando latentes riesgos externos derivados del alza en el precio del petróleo y del coste de financiación en próximos años, que podrían tener incidencia en la renta disponible de las familias y en el consumo privado. El 'brexit' es otro factor de riesgo, por la alta exposición que la economía regional ante Reino Unido».
