El barrio de Santa Eulalia es un barrio bohemio, una zona de la ciudad en la que se respira arte y creatividad y que es así desde hace tiempo. En él residieron pintores como Mariano Ballester, Francisco Cánovas, Luis Garay, Pedro Flores, Ramón Gaya, José Antonio Molina Sánchez, José María Falgas y José María Párraga. También por sus calles se movieron escultores como Juan González Moreno, Antonio Campillo, Pepe y Paco Toledo, Antonio Garrigós, Hernández Cano, Elisa Séiquer o Pedro Pardo. Para rendirles un homenaje a todos ellos, el Ayuntamiento de Murcia ha instalado, dentro del proyecto ADN Urbano, un total de once placas conmemorativas ilustradas con los retratos de estos maestros de la pintura y la escultura del siglo XX, unas placas que fueron descubiertas ayer por el alcalde de Murcia, José Ballesta, junto a la concejala de Juventud, Rebeca Pérez, y el concejal de Empleo, Turismo y Cultura, Jesús Pacheco.

Estos distintivos informan también sobre la vinculación de los artistas con los edificios del barrio, en los que vivieron o tuvieron sus estudios artísticos, y el periodo en el que desarrollaron su trabajo. El acto tuvo lugar en la calle Vara de Rey, donde se encontraba el Archivo Notarial, lugar en el que tuvieron su estudio a principio y mediados del siglo XX Ballester, González Moreno, Campillo, Pepe y Paco Toledo, Garrigós y Hernández Cano.