Las plazas peatonales han experimentado desde hace ya bastante tiempo una transformación importante. Han mejorado su aspecto con actuaciones urbanísticas, financiadas con dinero público, y también han visto mejorada su edificación con la renovación de viejas viviendas, que han dado paso a casas de lujo en algunos casos.

Estos espacios además han sido los predilectos de los hosteleros para poner sus negocios, una circunstancia que las ha llenado de vida. Sin embargo, como todo, tiene su parte negativa o distintos puntos que necesitan mejorar. Uno de ellos es el uso de las terrazas de la vía pública que, en algunos casos, se ha visto invadida por mesas y sillas de locales que incluso han utilizado el derecho de ocupación de la calle de bancos y otros establecimientos que no se dedican a la hostelería, pero sin embargo tiene derecho a veladores.

Ahora, ha llegado el momento de poner orden y de establecer una serie de límites para garantizar el paso de las personas, de los vehículos de emergencias y de los servicios de Policía Local y Bomberos. El Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Calidad Urbana, ha comenzado a inspeccionar las terrazas de la ciudad. La primera zona que está siendo ya revisada es la plaza de Santo Domingo, una inspección a la que ya se le había dado luz verde antes de que cayera el centenario ficus.

Estas revisiones, según explicó a esta Redacción el concejal de Calidad Urbana, José Guillén, se están llevando a cabo en colaboración con los hosteleros y con los vecinos. «Se están buscando soluciones técnicas , que den seguridad jurídica, al mismo tiempo que se consensúa todo ello con los propietarios de los negocios y también con los ciudadanos», afirmó el edil, quien añadió que «una de las prioridades del Ayuntamiento es hacerlas accesibles y por eso en algunas zonas hay que equilibrar su uso público». Sobre Santo Domingo, el responsable político señaló que había también quejas porque «hay problemas de permeabilidad de acceso al resto de comercios, que no son cafeterías y locales similares».

Una de las terrazas que verá reducida su extensión es la que se encuentra junto a la entidad bancaria, en una esquina de la plaza de Santo Domingo, que precisamente tenía permiso de ese banco para disfrutar de las mesas y sillas que le correspondían a la entidad financiera. Es decir, tenía un permiso del banco para ocupar el espacio.Otros negocios de la plaza se han quejado de la reducción de veladores, que podría incluso llevarlos al cierre.

El Ayuntamiento tiene previsto chequear otras plazas como Las Flores, donde se produce una aglomeración importante de terrazas con mobiliario urbano de difícil retirada en caso de que fuera necesario por una emergencia. San Juan y la plaza Mayor están también en la lista de los inspectores de Calidad Urbana, al igual que la plaza del Cristo de Rescate, Cristo del Resucitado y la plaza de Europa, que están dentro del programa ADN, que se está desarrollando para revitalizar el barrio de Santa Eulalia y zonas adyacentes. En Alfonso X, la Concejalía de Calidad Urbana ha actuado ya poniendo «indicadores» para controlar las dimensiones de las terrazas, señaló Guillén.