La columna de humo se veía a larga distancia. Era tan alta que alarmó a los ciudadanos, y muchos de ellos llamaron al 112. Ya fuese para informar o para solicitar información.

Casi una veintena de efectivos de los Bomberos de Murcia se movilizaban este sábado por la tarde para sofocar un incendio que empezó siendo de cañas y matorrales en la capital murciana, pero que se complicó y se extendió hasta La Arboleja.

El fuego comenzó a extenderse tanto que los Bomberos optaron por solicitar la presencia en la zona de un helicóptero.

Asimismo, prácticamente al mismo tiempo, se generó otro incendio, este por la zona de Beniaján y Torreagüera.

De la maleza pasó a la huerta. Limoneros y naranjos quedaron afectados al paso del fuego. Y no sólo afectó a la naturaleza: testigos explicaron que el incendio hizo que explotasen dos torres de alta tensión. Además, el fuego chamuscó cables que había por la zona.

La extensión del paraje afectado obligó a los bomberos a emplearse a fondo. Y a reclamar más manos.

En Beniaján, fuentes cercanas apuntaron que la primera impresión es que el incendio fue provocado. Agregaron que no es la primera vez que pirómanos actúan por esta zona.