Una pareja que fue condenada por un juzgado de instrucción de Murcia al pago de una multa por ocupar con varios familiares una vivienda ubicada en la pedanía murciana de Cabezo de Torres aseguró en el recurso que presentó ante la Audiencia Provincial que se vio obligada a tomar esa decisión al «no tener dónde ir».

La sentencia de la Audiencia, que desestima así su recurso, señala que el juzgado condenó a cada uno de ellos -un hombre y una mujer-, al pago de una multa de 90 euros como autores de un delito leve de ocupación ilegal.