La hermana menor de Qamar, la niña siria con problemas de salud que la asociación Amigos de Ritsona está intentando traer a Murcia para ser tratada de una enfermedad respiratoria y del corazón, también ha caído enferma con los mismos problemas.
La familia estaba cerca de viajar a Murcia, procedentes del campo de refugiados de Ritsona, para que la niña fuese acogida por la asociación Cepaim, pero "los billetes no han llegado. Nos dijeron que habría un vuelo en enero, luego dijeron febrero y más tarde nos dijeron marzo", explica el cura Joaquín Sánchez, muy pendiente de la salud de las dos pequeñas.
El sacerdote asegura que el problema se ha agudizado, ya que la pequeña Evelina, de cuatro meses, padece problemas del corazón y respiratorios, asociados a la misma enfermedad que padece su hermana Qamar. De hecho, el pasado martes la pequeña tuvo que ser atendida por Cruz Roja debido a que su pulso era muy bajo, y fue trasladada al hospital de Atenas.
Aunque ya tenían el visto bueno del Gobierno español para viajar a la Región, desde la Delegación del Gobierno en Murcia no dan ninguna explicación al retraso de los vuelos, según las explicaciones de Joaquín Sánchez. "Esta todo preparado, sólo les falta el avión", indica, mientras espera una respuesta ante este nuevo revés.
Por su parte, Qamar se mantiene estable, no ha empeorado, aunque los médicos advierten de que a medida que pase el tiempo su deterioro será mayor. "No pueden esperar más", explica el sacerdote.
