Las reuniones para acercar posturas entre los grupos municipales que permitan sacar adelante los presupuestos de 2017 siguen su cauce, según afirmó ayer el alcalde de Murcia, José Ballesta, quien se mostró partidario de «mover partidas» y hacer hueco a las propuestas de la oposición, «pero siempre bajo una lógica presupuestaria». Respecto a la posibilidad de aumentar las inversiones en pedanías, el primer edil dijo que «tenemos un techo presupuestario y limitaciones en nuestra capacidad de endeudamiento, por lo que no podemos comprometer el futuro del Ayuntamiento».

En cuanto a la petición de que las juntas municipales gestionen el 8% del presupuesto Ballesta recordó que «en el último año ha aumentado el gasto corriente un 30 por ciento y las inversiones más de un 40 por ciento, inversiones que han gestionado las pedanías y es por esa senda por la que queremos seguir».

El PSOE pide una oficina única

El grupo socialista exigió ayer al Gobierno municipal que ponga en marcha una oficina única «para acabar con los laberintos administrativos que dificultan la labor de las juntas municipales y permitir a los alcaldes pedáneos efectuar los trámites de forma directa y correcta y dentro de plazo». La petición ha surgido a raíz de «la falta de diligencia que se está produciendo en la tramitación de las últimas facturas de 2016 en la Concejalía de Descentralización», según el concejal socialista Enrique Ayuso. Al edil del PSOE contestó también ayer el responsable de esta área, Pepe Guillén, quien afirmó que «la ejecución presupuestaria de las juntas municipales de Murcia ha alcanzado un 94%, la mayor en toda la historia del municipio». Y aseguró que nueve euros y medio de cada diez que gestionan las juntas municipales se han gastado en mejoras dedicadas a los vecinos de las pedanías.