Un adolescente acabó el pasado jueves en el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia tras jugar con sus compañeros de instituto al denominado 'juego de la asfixia', una peligrosa moda que está llegando desde el otro lado del charco a la Región.

Fue «una caída de patio con muy mala suerte», explican allegados al menor. Cayó de frente y se dio en la barbilla, con la mala fortuna de que sufrió una fractura de mandíbula. Además, perdió el conocimiento.

El niño, que estudia 2º de la ESO, fue trasladado al complejo hospitalario de El Palmar, aunque ayer ya estaba en su domicilio de Murcia, donde se recupera. La semana que viene ha de regresar a la Arrixaca, para las pruebas de anestesia, dado que ha de ser operado en los próximos días.

Fuentes cercanas detallaron que este juego extremo «ya lo habían hecho otras veces» los chavales en este instituto «y no les había pasado nada».

En este sentido, hicieron hincapié en la importancia de concienciar a los más jóvenes de que estas prácticas son peligrosas y pueden acarrear secuelas graves en quienes 'juegan' a esto.

Desde la Jefatura de Estudios del Instituto de La Flota, donde tuvieron lugar los hechos, confirmaron el caso e hicieron hincapié en que lo prioritario es «la pronta recuperación del niño».

Asimismo, dejaron claro que el instituto es un lugar seguro y que lo sucedido ha sido un hecho puntual. No obstante, declinaron hacer más declaraciones al respecto, pues correspondería hacerlo, apuntaron, a la dirección. Este periódico intentó ponerse en contacto con la dirección de este centro educativo, sin éxito.

El juego de la asfixia (también conocido como 'shocking game') es una práctica peligrosa que tristemente se está instalando en la Región: se trata de inducir a una persona al desmayo. Lo hacen con el consentimiento de la víctima. De hecho, se considera eso, un juego. Está de moda en países como Chile, México o Argentina, y desde ahí se cuelgan vídeos en la plataforma YouTube en la que se ve a gente (generalmente, varones jóvenes, muchos menores) 'jugando'. Esta práctica puede ocasionar daños neurológicos e incluso la muerte.

Por fortuna, en esta ocasión ha quedado en un susto.

Apretar el cuello o aguantar la respiración

Pérdida de la memoria. Dificultad de concentración. Alta pérdida de neuronas. Pérdida permanente de funciones neurológicas o daño cerebral. Problemas neurológicos de por vida. Convulsiones. Desmayo. Coma. Muerte. Son algunas de las consecuencias que, alertan los médicos, puede acarrear la práctica de este juego. Se usan técnicas como la compresión bilateral del cuello o una forma alternativa que consiste en tomar una respiración profunda y sostenida, mientras que otra persona lo abraza desde atrás hasta que el primero se desmaya.