El concejal de Cambiemos Murcia Sergio Ramos va a presentar una moción al Pleno de este mes para que el Ayuntamiento realice un censo municipal de los inmuebles rústicos y urbanos que están a nombre de la Iglesia Católica y otras confesiones religiosas a fin de que paguen el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) por aquellos espacios que no están dedicados al culto. Ramos recordó que el IBI es el impuesto más importante de los ayuntamientos por su impacto en las finanzas municipales y que en el caso del de Murcia, los ingresos por este tributo alcanzaron los 116 millones de euros de los 400 que recibieron las arcas municipales el pasado año.

A su juicio, el modelo de tributos del Ayuntamiento de Murcia es «poco redistributivo e injusto» como demuestra que residentes en barrios históricos como El Carmen o El Infante paguen más por sus viviendas que aquellos que viven en la conocida como 'Milla de oro', en Juan Carlos I.

Se podrían ingresar 700.000€

«No es de recibo que mientras se multa a cualquier ciudadano por el mínimo cambio en sus casas en la huerta de Murcia, con fotografías aéreas y la máxima diligencia, estemos dejando de ingresar un presupuesto importante», que según cálculos aproximados es de 700.000 euros anuales, «por no hacer cumplir la legislación en relación a la Iglesia», dijo Ramos.

Solo los espacios destinados al culto está exentos de pagar el IBI, según el Concordato suscrito en 1979 por la Iglesia Católica y el Estado y diferentes acuerdos de cooperación firmados en 1992 para otras confesiones religiosas. «Pero lo cierto es que la Iglesia no está pagando por ninguna de sus propiedades, y son muchas», añadió el concejal del grupo Cambiemos Murcia.