Como no es lo mismo conocer algo de oídas que verlo en persona, medio centenar de vecinos de la Costera Sur y miembros de la Plataforma Pro-Soterramiento se desplazaron en la tarde de este martes en tren de cercanías hasta la estación de Beniel para observar de primera mano cómo son las barreras antirruidos, los pasos a nivel en altura y las pantallas acústicas que se han hecho con motivo de la futura llegada del tren de Alta Velocidad (AVE).

Tras coger el convoy de las cuatro de la tarde y después de tan solo diez minutos de trayecto, a la llegada a Beniel lo primero que llama la atención son grandes barreras de varios metros de altura que parten en dos la población con las vías ferroviarias como línea divisoria. «Es como tener un muro de Berlín. Tengo que dar un rodeo de dos kilómetros para ir a ver a mis amigos al otro lado de las vías, ya que no puedo cruzar la pasarela con la bicicleta», comentaba un vecino de avanzada edad de la localidad a los visitantes tras preguntarles que por qué había tanta gente allí.

Es cierto que no debe ser muy habitual ver a un grupo tan amplio de personas en el entorno de la estación de Beniel un martes por la tarde, pero la ocasión era propicia para conocer qué futuro tendrá la homóloga de El Carmen, ya que el proyecto planteado para la llegada del AVE contempla que desde el paso a nivel de Santiago el Mayor hasta el interior de los andenes hay casi medio kilómetro en el que las barreras serán similares a las que ya se pueden ver en Beniel.

Otra de las infraestructuras que más llamaron la atención fue una gran pasarela peatonal metálica para conectar ambos lados de las vías con ascensores. Son similares a los que el Ayuntamiento de Murcia anunció hace unos días que se harán en la zona de Santiago El Mayor durante la ejecución provisional en superficie de las obras de soterramiento y que, además, «contará con los elevadores para facilitar el tránsito de personas con movilidad reducida», aseguraba el Consistorio.

Como en toda la tarde, el portavoz de la Plataforma, Joaquín Contreras, explicaba los entresijos de las obras a los vecinos, que no paraban de corear su ya famoso 'Nosotros por arriba, el tren por abajo' por Beniel. Al llegar a otra pasarela, esta vez sin ascensores, que enmarca el lado derecho de la estación para enlazar ambos lados de las vías, las dudas sobre lo elevado de las escaleras y la dificultad de las personas mayores para atravesarlo fueron otras de las inquietudes que surgieron. Y es que el paso del AVE, con las catenarias con 25.000 voltios, hace que la altura de los pasos y pasarelas sean impresionantes.

El motivo del viaje de ayer era también demostrar que en tan sólo 10 minutos se llega en cercanías a Beniel, lo que hace que desde la Plataforma Pro-Soterramiento se pregunten que «por qué no se hace una estación final provisional en esta localidad, mientras se trabaja en el soterramiento integral hasta el interior de El Carmen». Tras más de hora y media de excursión, la vuelta se produjo en el tren de las 18.10 horas, ya que la concentración habitual de los martes en el paso a nivel de Santiago el Mayor es una costumbre que no podía dejar de cumplirse ayer. Sólo falta que su objetivo se cumpla.