La juez ha autorizado la exhumación del cuerpo de Mª Carmen García, de 44 años, con el fin de que se le practique la autopsia y tratar de esclarecer así las causas de su muerte, confirmaron a LA OPINIÓN fuentes cercanas.
La exhumación tenía lugar el pasado lunes, en el camposanto de Javalí Nuevo (donde la mujer fue enterrada) y se hizo en presencia de familiares directos.
El cadáver fue llevado el Instituto de Medicina Legal, en la capital murciana, donde en el día de ayer estaba previsto que comenzase la autopsia, en presencia de un responsable del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional, que se hace cargo del caso.
La Policía abrió una investigación, tras la denuncia de la familia, durante la cual ha tomado declaración a parientes y allegados de la difunta y se personó en el hotel en el que se produjo el óbito.
Ahora, la investigación permanece a la espera de que los informes de los forenses arrojen luz sobre una muerte que parte de la familia de García considera sospechosa, como así denunció.
García trabajaba como operadora de los Bomberos en el parque del Infante, en Murcia, y su repentino fallecimiento causó impresión en sus compañeros, que le dedicaron un emotivo vídeo de despedida. Además, el día del entierro, decenas de bomberos, en varios vehículos, acompañaron al féretro e hicieron sonar las sirenas para manifestar el cariño que sentían por su compañera.
«Lo que queremos es prudencia», señaló a este periódico una familiar de la fallecida. Esta persona manifestó su confianza en la juez encargada del caso, una mujer «muy incisiva» de la que esperan que esclarezca las causas de un óbito que, a juicio de una parte de la familia, no está claro.
La causa oficial, hasta que se publique el resultado de la autopsia, es muerte natural.
